Cientos de personas han participado este sábado en la concentración convocada por los defensores de la Sanidad Pública para exigir una sanidad universal y accesible para todos. "La salud es un derecho universal y la sanidad pública, la única en garantizarlo", han expresado los convocantes. Este derecho no puede perderse, y todas y todos tenemos la obligación de defenderlo, porque aquí está en juego lo más importante y valioso: la vida.
El acto, que ha tenido lugar en la Plaza de Navarra, ha sido convocado por la Plataforma Ciudadana “UVI Móvil Jaca, ¡la necesitamos!”, la Plataforma Ciudadana “SOS Sanidad Rural” de Almudévar y Ayerbe, y la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Huesca.
En la lectura del manifiesto, han subrayado que contar con una sanidad pública, universal y de calidad significa hablar de solidaridad, igualdad, equidad y ayuda mutua. “Se trata de una sociedad que garantiza el bienestar de todas las personas, sin importar su origen ni género", afirman los convocantes en su manifiesto. Esta lucha se dirige contra quienes pretenden convertir en negocio lo que debería ser un derecho social fundamental, y por ello, rechazan la privatización y el desmantelamiento progresivo que amenaza nuestro sistema sanitario.
En el contexto del Estado democrático, los convocantes destacan que la Sanidad Pública es un pilar esencial que ha demostrado ser eficaz y un modelo de buenas prácticas. Sin embargo, advierten que la gestión privada, con sus supuestos modelos innovadores, solo busca maximizar beneficios, eligiendo los servicios más rentables y sacrificando la atención a los pacientes y las condiciones laborales de sus trabajadores.
Para la provincia de Huesca, de características eminentemente rurales, los organizadores alertan que la privatización limitaría el derecho a la salud en el medio rural, contribuyendo además al despoblamiento de los pueblos. "En defensa de la Sanidad Pública, estaremos vigilantes y desvelaremos las verdades frente a cualquier cortina de humo", han declarado los convocantes. Afirman que la Sanidad Pública no puede ser residual, sino que debe ser universal y accesible para todas y todos.
Desde las Plataformas en Defensa de la Sanidad Pública, los organizadores se comprometen a investigar las listas de espera, la disponibilidad de servicios en los centros de salud, los equipos sanitarios y el transporte sanitario. Además, monitorearán la calidad de la atención primaria, la atención especializada, la gestión hospitalaria y la salud mental.
Proponen blindar la financiación necesaria en los Presupuestos del Estado y Autonómicos para reducir las listas de espera y recuperar la inversión pública destinada a la formación de profesionales de la salud, asegurando que trabajen en la sanidad pública. "Queremos una sanidad pública de calidad en nuestro territorio rural, que ayude a fijar población y desarrollo", afirman los convocantes. También proponen que médicas y médicos residentes conozcan la realidad rural durante su formación y piden aumentar el personal sanitario en condiciones dignas, eliminando la precariedad.
Los organizadores exigen una inversión en infraestructuras y elevar del 13% al 25% el presupuesto en Atención Primaria. Asimismo, reivindican el Punto de Atención Continuada de Huesca como una verdadera Atención Primaria, cercana, general y familiar. En cuanto al transporte sanitario, piden mejoras en el contrato para favorecer tanto al personal como a la atención en casos críticos, considerando las características geográficas del territorio.
Los convocantes defienden una atención integral de la salud mental con un enfoque comunitario y de gestión pública, sin relegar este servicio a la periferia de los núcleos urbanos. También proponen ampliar la cartera de servicios de la sanidad pública, incluyendo la odontología, y mejorar la educación en salud, promoviendo el enfoque de género.
Finalmente, recalcan la importancia de la participación ciudadana a través de los Consejos de Salud, donde la población pueda contribuir activamente en la construcción de propuestas y en la evaluación continua de los servicios. Las plataformas del sector occidental del Salud de Huesca se han unido en este esfuerzo, porque consideran que lo que afecta a un núcleo pequeño afecta también a otros mayores, y que todos tienen derecho a la salud sin importar el lugar de residencia, la edad o las condiciones personales.
Desde esta plaza, los convocantes han expresado su apoyo a las Plataformas en Zaragoza, Teruel y todas sus comarcas. Al igual que ellas, proclaman con fuerza: ¡Por una SANIDAD PÚBLICA, UNIVERSAL Y DE CALIDAD, A LA PRIVADA CERO EUROS!
MEDIO RURAL
Por su parte, SOS Sanidad Rural Ayerbe ha leído un manifiesto en Huesca en el que ha denunciado con firmeza los recortes en sanidad que afectan de manera especialmente severa a los pueblos y zonas rurales. En su intervención, la plataforma ha señalado que estos recortes perjudican a los servicios públicos y benefician únicamente a intereses privados, a costa de debilitar derechos fundamentales como el acceso a una sanidad pública y de calidad, tanto en el medio rural como en el urbano.
En el manifiesto, SOS Sanidad Rural Ayerbe ha exigido que se garanticen condiciones adecuadas en los centros de salud rurales, empezando por la presencia de personal sanitario formado en urgencias y emergencias para asegurar una atención rápida y eficaz en situaciones críticas. Además, han reclamado un servicio de transporte sanitario bien equipado y con los recursos humanos y técnicos necesarios para cubrir con eficiencia las largas distancias y particularidades del entorno rural, siempre priorizando la seguridad tanto de los pacientes como del personal sanitario.
La plataforma ha denunciado también los problemas crecientes en la cobertura de plazas en atención primaria, pediatría y medicina de familia, exigiendo una gestión más efectiva que responda a las necesidades de cada territorio, dado que las características de las zonas rurales y la dispersión de su población requieren soluciones específicas. Han puesto como ejemplo el caso de Loarre, donde el número de consultas semanales se ha reducido de cuatro a dos, y la situación del centro de salud de Ayerbe, que atiende a 35 pueblos en condiciones cada vez más precarias, tras la pérdida de un médico cuya plaza no ha sido cubierta y la promesa incumplida de incorporar a dos enfermeras.
Finalmente, desde SOS Sanidad Rural Ayerbe han concluido el manifiesto subrayando que estos recortes solo agravan la situación de despoblación y centralización de servicios hacia las ciudades, haciendo cada vez más difícil la vida en los pueblos. Por ello, han lanzado un mensaje contundente: “Basta de recortes; Bancalero, la salud es lo primero”, exigiendo que se priorice la salud de los habitantes del medio rural y se respete su derecho a una sanidad pública digna y accesible.
FALTA DE UVI MÓVIL EN JACA
Por su parte, el colectivo UVI Móvil Jaca Ya ha leído un manifiesto en el que ha denunciado la falta de un servicio completo de UVI móvil en Jaca y su comarca, un área extensa y montañosa en la que la atención sanitaria de emergencias es vital. Según el colectivo, Jaca carece de una UVI móvil de 24 horas: solo dispone de este servicio entre las 9:00 de la mañana y las 21:00 de la noche, lo que significa que no existen recursos de atención urgente en horario nocturno, fines de semana ni festivos. "Es como si nuestras urgencias y enfermedades graves tuvieran que ajustarse a un horario", han afirmado en su intervención, señalando que esta limitación supone un riesgo mortal para quienes sufran infartos, ictus u otras emergencias vitales fuera de esas horas.
El colectivo ha explicado que la UVI móvil más cercana, en Sabiñánigo, debe cubrir no solo su propia comarca sino también la de Jaca, lo cual deja ambas zonas desatendidas cuando el servicio se moviliza para trasladar pacientes a hospitales en Huesca o Zaragoza.
Esta carencia de cobertura pone en riesgo la vida de las personas, ya que en emergencias graves, una UVI móvil puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Han recordado casos recientes en los que los pacientes, al no contar con una UVI móvil en el momento preciso, no han sobrevivido, y han señalado que esta realidad debería pesar en la conciencia de los responsables de la administración.
Con esta concentración, el colectivo ha querido subrayar la necesidad urgente de mejorar los servicios sanitarios en el medio rural, recordando que la ciudadanía de Jaca y sus alrededores también tiene derecho a una atención sanitaria de calidad. Han pedido que se garantice una sanidad pública digna y accesible, que no discrimine a quienes viven fuera de las grandes ciudades, reivindicando que "tenemos derecho a vivir con los mismos servicios y derechos, vivamos donde vivamos". El manifiesto ha concluido con una llamada contundente: “Por una sanidad pública decente, digna y para todos, con los recursos que merecemos”.