El ambiente en el IES Sierra de Guara era este sábado el reflejo de una convocatoria masiva de oposiciones docentes que se ha desarrollado, según denuncian numerosos participantes, en condiciones muy duras. La jornada ha estado marcada por el calor extremo, la falta de atenuantes y una organización que muchos califican de precaria. Aspirantes y miembros de tribunales coinciden en señalar el profundo agotamiento físico y mental que han sufrido, agravado por la temperatura sofocante en las aulas y la ausencia de agua disponible en el centro.
Desde primera hora, el calor se ha hecho notar especialmente en la segunda planta del instituto, donde se realizaban los exámenes de la especialidad de Orientación Educativa. "Hacía muchísimo calor. Solo había un ventilador por aula y las clases que daban a la cara este recibían directamente el sol toda la mañana", relata una persona que ha vivido la jornada desde dentro.
Aunque no había termómetros oficiales, algunos aspirantes midieron la temperatura con sus teléfonos móviles y, ya antes del mediodía, los dispositivos marcaban 34 °C en las aulas. La sensación térmica era incluso mayor, con un ambiente cargado y sin posibilidad de refrescarse. “Los opositores no podían ni abanicarse, porque estaban escribiendo, claro”, explica.
Uno de los puntos más comentados ha sido la ausencia de agua para los aspirantes. Muchos llevaron su propia botella, pero no todos, y no hubo ninguna previsión por parte de la organización para facilitársela a quienes la necesitaran.
Según el testimonio recogido, un miembro del tribunal, por iniciativa propia, ha acabado comprando botellas de agua para los aspirantes, de su propio bolsillo.
Tampoco ha sido mejor la situación para los miembros de los tribunales, docentes que tienen que asumir jornadas de trabajo muy por encima de lo establecido legalmente. "Nos están exigiendo de forma velada que trabajemos muy por encima de nuestra jornada legal para llegar a los plazos establecidos", han asegurado.
El objetivo impuesto: tener todo el proceso corregido y resuelto antes del 18 de julio. En la práctica, eso se traduce en semanas de más de 50 horas de trabajo, sin compensación económica ni reconocimiento oficial. “Ni te lo pagan ni te lo compensan ni te lo reconocen”, resume.
La situación contrasta con lo conseguido en otras comunidades como Valencia, donde las movilizaciones del profesorado han logrado mejoras sustanciales. En Aragón, sin embargo, el panorama es distinto: las dietas por comida no superan los 18 euros diarios, una cantidad que muchas veces no cubre ni el menú más básico. Además, si se come en casa o se adquiere comida en un supermercado, esa dieta no se abona. “Solo vale un ticket de restaurante. Y si el menú cuesta menos de lo establecido, te pagan justo eso. Nada más”, denuncian.
Los problemas tampoco acaban cuando termina el examen. El lunes y martes, las presidentas de tribunal deberán reunirse para elaborar los criterios de corrección de los temas, una práctica que también suscita críticas. “Nos exigen como profesorado que tengamos criterios de evaluación claros desde el primer día, pero a los opositores se les evalúa con unos criterios que se deciden a posteriori. Eso no es justo”, subraya una integrante del tribunal.
El proceso continuará en los próximos días con la lectura de los ejercicios y, en los casos que superen la primera fase, con la segunda parte de la oposición, que incluye la defensa de una unidad didáctica o un plan de intervención.
ALGO MÁS DE MIL PLAZAS
En Aragón, un total de 9.829 personas están convocadas a estas oposiciones para optar a 1.004 plazas de diferentes especialidades de Secundaria, Formación Profesional, Escuelas Oficiales de Idiomas y Artes Plásticas y Diseño.
Solo en la provincia de Huesca, las pruebas se reparten entre cinco centros educativos. En el IES Sierra de Guara, sede de la especialidad de Orientación Educativa, se han presentado 586 personas para 80 plazas, con una tasa de asistencia del 65,62 %. En otros centros oscenses también se han llevado a cabo pruebas de especialidades como Matemáticas (IES Lucas Mallada), Biología y Geología (IES Ramón y Cajal), Dibujo (IES Pirámide) y Música (EOI Sol Acín Monrás).
Las tasas de asistencia varían significativamente según la especialidad, con porcentajes más altos en Educación Física (71,54 %), Filosofía (70,56 %) o Inglés (68,96 %), y cifras más bajas en otras como FOL (44,32 %) o Administración de Empresas (47,94 %). Aunque el desarrollo de los exámenes ha seguido su curso previsto, el clima de fondo es de profundo descontento.