Lleva desde el martes en Sevilla prepárandose en el campo, concentrado enfocado en un único objetivo, en el "compromiso más fuerte que he tenido hasta la fecha". Es Ignacio Boné, el joven novillero de la Escuela Taurina Oscense que este viernes debutará con caballos. Lo hará en una de las capitales del toreo nacional como es Zaragoza, en la Feria de El Pilar 2023 en un cartel junto a Alejandro Peñaranda e Ismael Martín.
"Es un paso más en mi carrera porque voy a cambiar de escalafón y eso es muy importante", subraya Boné a pocas horas de poner rumbo a la capital hispalense. Es consciente que La Misericordia es una de las plazas de primera y "tiene una repercusión tremenda". Por lo tanto, "todo lo que haga ese día, va a tener mucha más importancia que cualquier otra vez".
El año pasado, este oscense ya tuvo la oportunidad de torear en Zaragoza en una novillada sin picadores. "Disfruté mucho, así que ahora espero hacerlo igual o más", desea entusiasmado. El festejo del viernes abrirá la Feria y será una novillada de los Hermanos Quintás. En el cartel, junto a Boné, están también anunciados Alejandro Peñaranda, quien ya dejó muy buenas sensaciones en San Isidro siendo triunfador de las novilladas picadas. También aparece Ismael Martín, un "gran torero" y finalista en numerosos circuitos de renombre en la presente temporada. "Son dos novilleros punteros y es un placer torear con ellos".
Boné cerró una etapa en Algemesí la pasada semana. Se despidió de novillero sin picadores y ahora escala en el escalafón, quemando las etapas naturales de la tauromaquia. "Ese fue un día muy bonito y especial, estuve muy a gusto con el novillo. Fallé con la espada y es algo que ya estoy intentando corregir con el máximo empeño posible para que no pase lo mismo el viernes. A ver si Dios quiere y en Zaragoza los mato". Los novillos que lidiará proceden de Flor de Jara, una ganadería que "suele salir muy buena" con encaste de Santa Coloma.
En Sevilla permanece estos días concentrado, haciendo algo de campo y mentalizándose para la tan señalada cita. "Quiero salir a disfrutar el viernes, que es lo principal, porque a veces se nos olvida. Nos pueden los nervios y la presió y se nos olvida disfrutar", recuerda.
Unos estudios ligados al campo
Aunque su sueño es ser torero, Boné sabe que no puede dejar a un lado los estudios, sino que se tiene que formar para garantizarse un futuro provechoso. "Hay días que tengo que faltar a clase por estos compromisos, pero al estar estudiando segundo de Ingeniería Agrónoma en la universidad tengo más libertad y puedo faltar más a clase, siempre y cuando responda y apruebe todas las asignaturas. Hay más libertad que en el bachillerato, cuando era más complicado llevar todo al día. Estoy muy contento con la carrera y, gracias a Dios, y toco madera, me está yendo fenomenal".
En Zaragoza, dada la cercanía con Huesca, estará arropado por numerosos aficionados, amigos y familiares que ya tienen su entrada para no perderse detalle de un día que jamás olvidará. "Estamos recibiendo un montón de apoyo y estoy seguro que disfrutarán y se creará afición, que es de lo que se trata", concluye. La del viernes será la primera de las 25 novilladas con caballos que deberá completar antes de tomar la alternativa como torero. Que Dios reparta suerte.