Familia, amigos y vecinos de Buil, en el término de Aínsa-Sobrarbe, han rendido un sentido homenaje póstumo este fin de semana a Daniel Ribera Soler, presidente que fue de la asociación de vecinos, así como concejal de Barbastro y diputado de la Diputación Provincial de Huesca, fallecía en octubre de 2024. Aprovechando la época estival, más allegados, en colaboración con el ayuntamiento, han podido encontrarse en la intersección entre Sarratillo, donde acostumbraba a pasar largas temporadas, y Santa María Buil, para inaugurar un parque en su recuerdo.
'En agradecimiento a Daniel Ribera Soler. Por su trabajo y dedicación como secretario y presidente de nuestra asociación de vecinos durante más de treinta años. Por su compromiso para impulsar iniciativas que han contribuido al desarrollo de nuestro pueblo. No estabas solo, pero fuiste pieza clave', reza el monolito ubicado en el parque, que ya estrenaron este sábado los más pequeños. El alcalde, Enrique Pueyo, así como el presidente de la Comarca, José Manuel Bielsa Manzano, el ex concejal José Luis Bergua, Daniel Gracia, diputado en la DPH o el veterano Antonio Cosculluela, que fue tanto compañero en política como amigo de Ribera, no faltaron a una cita donde las anécdotas, la música, las fotos y un agradable picoteo alargaron el emotivo homenaje.
“Lo que más me llamaba la atención eran la emoción, las ganas y la ilusión por mejorar la vida de sus vecinos y de su pueblo”. “La primera vez que coincidí con Daniel fue en el verano de 2007, justo al llegar al ayuntamiento. En la inauguración de la pista asfaltada que llegaba a Sarratillo y a Santa María de Buil, junto a Antonio Cosculluela al cual tenía en tan alta estima. Escucharles entonces a ambos, vivir ese instante, marcó el inicio de mi trayectoria en el ayuntamiento y en la política”, continuaba el alcalde, poniendo en valor “su dedicación y la predisposición para trabajar por los demás sin esperar nada a cambio”.
No faltaron las intervenciones de amigos y vecinos, como la de Paco Cámara y su familia, toda una vida compartida puerta con puerta en Barbastro, y también las fiestas, los fines de semana y los veranos en Sarratillo. Miguel Chicharro rescataba los intensos momentos vividos en la época en que crearon el grupo 'IV dimensión', asegurando que de los más de cincuenta años que compartió con él, “todos los recuerdos son buenos. He tenido un tesoro en mi vida”. Antonio Cosculluela cerraba el acto recordando la colaboración permanente y los inicios del trabajo conjunto en el ayuntamiento de Barbastro allá por los años 90. “Era muy difícil negarle nada porque lo ponía todo, el compromiso social, el altruismo eran parte de su forma de ser”.
Amenizando el acto, los hermanos Arasanz de Casa Juste de Sarratillo ofrecieron varias piezas musicales, y la vecindad organizó un picoteo para todas las personas asistentes. No faltaron tampoco las fotografías inundando el salón social de Casa Lueza, las flores, los abrazos y los agradecimientos hacia una persona cuya historia siempre quedará ligada a este rincón del Biello Sobrarbe, que volvió a la vida gracias a la generosidad y la tenacidad de un hombre incansable.