Centenares de oscenses se han manifestado este sábado bajo el lema #BoicotAIsrael y en apoyo a la llegada de la Global Sumud Flotilla a Gaza. La marcha ha arrancado a mediodía en la Plaza de Navarra, para recorrer varias calles del centro y culminar en la Plaza Cervantes, donde se ha leído un manifiesto frente a la Subdelegación del Gobierno. Durante el trayecto, se ha reiterado la importancia de que la ciudadanía haga cuanto está en su mano para secundar el apoyo a Palestina, por ejemplo dejando de consumir productos israelíes.
La manifestación ha estado presidida por una gran bandera de Palestina y se han coreado a la largo del recorrido varios lemas como "¿dónde están, no se ven, las sanciones a Israel?", "Israel asesino del pueblo palestino", "Gaza, no llores, volverán tus colores", "que viva la lucha del pueblo palestino", "son hospitales, no bases militares", "¿dónde están los derechos humanos?" y "no es una guerra, es un genocidio".
El manifiesto ha calificado como “horror genocida” la situación en la franja de Gaza, señalando que “desde hace 23 meses ya son más de 60.000 personas asesinadas, de ellas más de 18.000 niños y niñas”.
Se ha denunciado “la crueldad más inimaginable que se está ejerciendo sobre el pueblo palestino” y se ha sostenido que el genocidio no terminará cuando acabe el gobierno de Netanyahu, sino "con el fin de la ocupación, cuando se consiga la descolonización de toda Palestina”.
Además, se ha denunciado el uso del hambre “como arma de guerra contra civiles indefensos”, lo que estaría causando centenares de víctimas, especialmente entre la infancia. Asimismo, se ha advertido de que “la ciudad de Gaza está siendo sistemáticamente destruida por el ejército israelí durante meses”.
CISJORDANIA, JERUSALÉN ESTE Y LA DIÁSPORA
El documento ha extendido la denuncia más allá de Gaza: en Cisjordania y Jerusalén Este se producen ataques de colonos “cada vez más armados y agresivos, con protección o participación directa del ejército israelí”. También se ha destacado que pueblos y campos de refugiados enteros han sido desalojados y que las cárceles israelíes “encierran a miles de personas palestinas bajo condiciones de tortura sistemática”.
Igualmente, en el manifiesto se ha recordado que en la diáspora más de 8 millones de palestinos tienen prohibido regresar a sus tierras, mientras que “más de 60 leyes discriminan a quienes poseen ciudadanía palestina en Israel”.
Los convocantes han atribuido a Israel un papel estructural en sistemas de opresión a escala internacional, al señalar que “Israel representa y entrelaza imperialismo, colonialismo, racismo, chiceropatriarcado y capitalismo”. Según el manifiesto, este marco convierte la lucha palestina en una causa universal.
Igualmente, se ha subrayó que las empresas desempeñan un papel central: “Su complicidad no es marginal, estructural”. Estas compañías, han asegurado, aportan “recursos, legitimidad y tecnología al régimen israelí”, y se ha citado expresamente a Carrefour, acusada de “proporcionar alimentos al ejército israelí y mantener tiendas en los territorios ocupados”.
“Ningún beneficio vale más que la vida y la dignidad del pueblo palestino”, se ha afirmado , en referencia a la necesidad de romper la impunidad económica y reforzar campañas de boicot, desinversión y sanciones (BDS).
RESISTENCIA SOCIAL
"La sociedad civil organizada en todo el Estado y en especial en esta ciudad, así como en los diversos territorios del Alto Aragón, está sosteniendo una movilización histórica e incansable”, han declarado, para recalcar después que estas acciones “empiezan a abrir grietas en el muro de la impunidad”.
Como ejemplo, se ha recordado la protesta contra la participación de un equipo oficial israelí en la Vuelta Ciclista a España, donde “miles de ciudadanos y ciudadanas han dicho alto y claro: no queremos genocidas en nuestras carreteras”.
El texto ha añadido que todavía muchos gobiernos, universidades, empresas e instituciones europeas mantienen relaciones con Israel “con total normalidad” y ha reclamado que esa complicidad “tiene que acabar”.
LLAMADA AL GOBIERNO
Por otro lado, se ha acusado al Gobierno español de dar pasos “tibios, insuficientes y engañosos” sobre el embargo de armas. Se ha exigido la ruptura inmediata de todas las relaciones diplomáticas, económicas, culturales, académicas y militares con Israel, además de un embargo total de armas, tecnología militar y vigilancia “por Real Decreto”.
Otra reivindicación ha sido que España respalde plenamente las denuncias por genocidio presentadas por Sudáfrica ante la Corte Internacional de Justicia y se adhiera al proceso en la Corte Penal Internacional.
Asimismo, se han reclamado sanciones internacionales contra Israel, la derogación de la Ley Mordaza y “el fin de la criminalización de la solidaridad con Palestina”.
LA GLOBAL SUMUD FLOTILLA
El manifiesto ha dedicado especial atención a la Global Sumud Flotilla, “la flota civil más grande jamás organizada, compuesta por el movimiento global AGaza, la coalición de la Flotilla de la Libertad, la Flotilla Magrets Sumud y la Sumud Nusuntara”. Está formada por cientos de activistas y docenas de barcos de diferentes países, que transportan medicamentos, comida y ayuda humanitaria con destino a Gaza.
El texto ha advertido que la flotilla está siendo atacada por el ejército israelí, pero ha resaltado su determinación de “romper el bloqueo y llegar a la costa palestina”. Y ha añadido: “Su misión es la nuestra, nuestros corazones navegan con ellas”.
El manifiesto ha concluido con un tono de firmeza y continuidad:“No nos detenemos y no nos pueden detener. No vamos a parar hasta acabar con toda la complicidad. No vamos a parar hasta que la descolonización y la liberación de Palestina sea completa, porque la lucha del pueblo palestino es la lucha de toda la humanidad”.