Cerca de 150 personas se han concentrado este miércoles en la plaza de Navarra de Huesca tras una pancarta con el lema “No a la guerra”, convocados por Bienvenidos Refugiados y CNT por una Palestina libre y para exigir que “pare el genocidio”.
Ante la situación de “guerra abierta entre el Estado de Israel y Hamas” en la Franja de Gaza, desde Bienvenidos Refugiados se ha tomado la palabra para, en primer lugar, expresar su “dolor, indignación, y rechazo a los crímenes de guerra perpetrados por la organización Hamas atacando por sorpresa, secuestrando y asesinando deliberada e indiscriminadamente a civiles israelís”.
Este colectivo, que hace del no a la guerra una proclama esencial de su actividad, también ha manifestado su “dolor, indignación y rechazo por la represalia genocida del Estado de Israel sometiendo a la población palestina en la Franja de Gaza a una violencia asesina y destrucción desproporcionada e indiscriminada, sin distinción ninguna entre combatientes y civiles, en lo que supone, asimismo, crímenes de guerra”, ha afirmado.
Bievenidos Refugiados denuncia al Estado de Israel por su “continuada política imperialista y colonialista de apartheid y genocidio en la práctica contra la población palestina; una política que no cesa de incrementarse alentada por la complicidad tácita de las llamadas democracias occidentales”.
Asimismo, critica el “silencio cómplice ante esa situación inhumana, contraria al Derecho Internacional y los Principios de la Carta de Naciones Unidas, de nuestros gobiernos occidentales, Unión Europea y EEUU a la cabeza; unos Estados que hacen de la defensa de los intereses económicos de sus elites las guías de su actuación, de manera que todas sus proclamas sobre libertad, democracia y derechos humanos son falsas y una prueba de su hipócrita doble moral buscando confundir a la ciudadanía y conformar una opinión pública dócil y alienada”.
Finalmente, reconoce y reivindica el “legítimo derecho del pueblo palestino a volver a sus tierras robadas, el regreso de los millones de refugiados y a constituirse como Estado”.
Por su parte, desde CNT se ha leído un comunicado en el que se denuncia que, “con la excusa del terrorismo, Israel aplica una política de terror y expulsión mediante permanentes incursiones militares, en las que con asiduidad se perpetran crímenes de guerra”.
También se ha puesto de manifiesto la “permanente ilegalidad del Estado de Israel, un estado que a día de hoy incumple más de 100 resoluciones de Naciones Unidas y más de 40 resoluciones del Consejo de Seguridad”.
Asegura que la Unión Europea y, en particular, el Estado español son “un buen ejemplo de esa complicidad internacional con las políticas genocidas de Israel”, a través de acuerdos comerciales, entre ellos “la compraventa de armas”.
“Queremos denunciar -señala CNT- la hipocresía de tratar de igualar a los actores del conflicto, de esconder las masacres de nuestro socio comercial, de garantizar y camuflar nuestro supuesto estado de bienestar con la venta de armas que sirven para asesinar al pueblo palestino”.
Respecto a Hamas, apunta que “es cierto que refleja la perdida de la moralidad de la causa de los justos, que no se puede justificar la matanza de niños y niñas o la exhibición de mujeres como trofeos de guerra. Es triste que los justos pierdan la moral, pero es el reflejo del sufrimiento, la miseria, la barbarie y el odio que genera la guerra perpetrada por Israel. Aun así, estas imágenes utilizadas por los medios occidentales hasta la saciedad esconden el verdadero rostro del conflicto, suponen una parte mínima de éste y para nada reflejan las aspiraciones reales del pueblo palestino”.
Señalan a Israel como “único culpable de esta situación y a las potencias occidentales que siguen blanqueando sus crímenes. Al Estado español por su venta de armas y su colaboración militar con tropas en el Líbano”.
“Nos solidarizamos con la lucha del pueblo de palestina y con su derecho a defenderse. Porque la única manera de encontrar la paz, es acabar con el genocidio y la ocupación israelí”, concluye el comunicado de la CNT.