El Tribunal Superior de Justicia de Aragón ha dictado sentencia condenatoria en un caso de agresión sexual cometida en Jaca en el que el acusado ha sido hallado responsable de cometer el delito con violencia. Tras un exhaustivo análisis de las pruebas y los hechos, el tribunal ha impuesto una pena de ocho años de prisión al acusado, a quien también se le han asignado diversas medidas de seguridad y reparación a la víctima.
La sentencia, dictada conforme a lo establecido por el Código Penal y la Ley Orgánica 4/2023, detalla que el condenado deberá cumplir la pena de prisión, así como una serie de medidas adicionales. Entre ellas, se encuentra la inhabilitación absoluta durante el tiempo que dure la condena, prohibiéndole ejercer cualquier tipo de función pública, privada o profesional que implique contacto directo con personas menores de edad.
Además, el tribunal ha determinado que el acusado deberá mantenerse alejado de la víctima, imponiéndole la prohibición de acercarse a su domicilio, lugar de trabajo o estudio, o cualquier otro lugar frecuentado por ella, a una distancia mínima de 1000 metros, durante un total de 13 años. Este tipo de medidas tienen como objetivo garantizar la seguridad y bienestar de la víctima a largo plazo.
El fallo también incluye una medida de libertad vigilada, que consistirá en la prohibición de comunicación con la víctima por cualquier medio, directo o indirecto, y la prohibición de aproximación a la víctima en un radio de 1000 metros. Esta medida se ejecutará una vez cumplida la pena privativa de libertad, y se extenderá por un periodo de 7 años.
Los hechos ocurrieron en un contexto de violencia y intimidación, durante el que el agresor aprovechó su relación con la víctima para cometer el delito. La víctima sufrió daños físicos y psicológicos graves, incluyendo un trastorno de estrés postraumático y una grave afectación en su bienestar emocional.
INDEMNIZACIÓN
En cuanto a la responsabilidad civil derivada de los hechos, el tribunal ha fijado una indemnización a favor de la víctima por un total de 20.000 euros, en reconocimiento a los daños sufridos a consecuencia de la agresión sexual. Los informes forenses presentados en el juicio indicaron que la víctima sufrió lesiones físicas y una agudización de un trastorno psicológico previo, que incluyó síntomas de ansiedad, depresión y estrés postraumático.
Además, el tribunal ha condenado al acusado a pagar las costas procesales, que incluyen tanto los gastos generados por la acusación pública como por la acusación particular, de acuerdo con la normativa establecida en la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
La sentencia subraya la gravedad del delito cometido y refuerza la importancia de una respuesta judicial firme ante casos de agresión sexual, buscando siempre garantizar la protección de las víctimas y la aplicación adecuada de las sanciones correspondientes.
Esta condena también resalta el esfuerzo del Tribunal Superior de Justicia de Aragón por mantener una postura enérgica frente a este tipo de delitos, destacando la relevancia de las medidas de rehabilitación y protección para las víctimas a largo plazo.
Conforme a lo dispuesto por la ley, el condenado tiene derecho a presentar un recurso de apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Aragón en un plazo de diez días desde la notificación de la sentencia.