Cristina Acín, decana de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza, ha pronunciado la ponencia inaugural del 9º Foro de Empresas y Autoempleo, Ideandando, que se ha celebrado en el salón de actos de la DPH, enfocado a la innovación y las nuevas tecnologías, organizado por la Comarca de La Hoya y Adesho.
Acín, nacida en Bolea, ha abordado en este foro cómo se aplican las nuevas tecnologías al diagnóstico y a la prevención de las enfermedades animales, y ha marcado cuál debe ser el futuro, que ha resumido en “trabajar unidos por una única salud”. “Apliquemos innovación, trabajemos a la par los veterinarios con los médicos por una única salud, colaboremos todos, científicos, veterinarios, propietarios… La sociedad en general debe trabajar en común y asegurar esa salud muy prometedora para nuestros animales”.
La decana de la Facultad de Veterinaria también ha resumido los desafíos actuales. El primero, y más importante, “la resistencia a los antibióticos. Está en manos de todos. No solo la Seguridad Social o la medicina veterinaria, es una cuestión nuestra”, ha destacado. Otro desafíos son el cambio climático y la protección del medioambiente.
Ha comenzado explicando el concepto de una sola salud (one health), que es “darnos cuenta -ha dicho- que todos estamos perfectamente interrelacionados. La salud animal, la salud pública y la salud del medioambiente es única, de forma que tenemos que trabajar todos en común, tanto médicos como veterinarios, como epidemiólogos, como todos aquellos que se aseguran de que el medioambiente funciona”.
En este sentido, a la hora de aplicar esas nuevas tecnologías, los veterinarios tienen que usar “exactamente lo mismo que han utilizado los médicos. La idea es que, si protegemos a nuestras mascotas, nos estamos protegiendo a nosotros”.
Cristina Acín ha abordado las enfermedades emergentes, la reemergentes y las nuevas tecnologías que se utilizan para el diagnóstico y la prevención. Al abordar este tema, ha considerado que ante un brote, “lo ideal es que haya una indemnización para garantizar la transparencia. Porque si queremos que verdaderamente se declaren las enfermedades, lo primero que tenemos que decir al ganadero es que va a ser indemnizado. Una vez que tengamos verdaderamente un buen plan y este punto es político no es sanitario, entonces ya tenemos los mecanismos de respuesta”, ha añadido. El veterinario establece un sistema de bioseguridad, mediante zonificación y compartimentalización, y después aplica la estrategia terapéutica. “No solamente vamos a tratar a los enfermos, sino que tendremos que pensar en una vacunación. Y por último, saber identificar y trazar a todos nuestros animales”.
Se ha referido Acín a que a nivel global existen una gran cantidad de enfermedades que afectan a veces solo a los animales y otras se transmiten al hombre (zoonosis) y, en este sentido, ha insistido en ir de la mano de la medicina en el objetivo de fomentar las nuevas tecnologías, de la innovación.
“El 60 % de los patógenos humanos son de origen animal, el 75 % de las enfermedades animales emergentes pueden transmitirse a los humanos y cada 8 meses surge una enfermedad emergente que afecta al hombre y que afecta a los animales”, ha transmitido.
La decana de la Facultad de Veterinaria ha diferenciado la innovación y las tecnologías al hablar de ganadería o animales domésticos. ”En la ganadería buscamos un sustituto del antibiótico”. En este punto se ha detenido en la gran relevancia de la antibiorresistencia, “Me preguntan cómo voy a ser yo resistente a los antibióticos si no los tomo. Da lo mismo. Si las personas que toman antibióticos frente a una bacteria en vez de tomarlos 8 días los toman 4, esa bacteria se hace resistente y puede infectarme a mí, y por mucho que yo no haya tomado nunca antibiótico, ya no me hará nada. Esto es una labor de todos. La salud pública también tiene que ir a la par del enfoque de la sanidad animal, eso es lo que debería ser”. A ello ha añadido la búsqueda de vacunas.
En los animales de compañía hay más terreno para la innovación, “porque son mucho más longevos. Tienen las mismas patologías que los humanos y además tenemos fuertes lazos con ellos y somos capaces de invertir una gran cantidad de dinero y de tiempo en mantener la sanidad animal.
Dentro de la investigación en nuevas tecnologías, “tenemos que pensar en tratamientos innovadores, que vayan directamente a la diana. Además, tendremos que pensar en prevención, a través de vacunas. En tercer lugar, la genómica veterinaria, que tiene que ver en cómo actuamos con los genes de los animales para prevenir enfermedades”, ha explicado. A estos puntos ha añadido Acín la medicina regenerativa, además de la bioimpresión 3D, para generar organoides (crear órganos artificiales).
“También tenemos nanotecnología, que sobre todo esto sirve para hacer un tratamiento innovador. Son muy importantes los nanosensores, pero también los nanotransportadores de medicamentos; en este caso van los fármacos directos hacia el objetivo”, ha explicado Acín
Para finalizar, ha sumado la realidad virtual y realidad aumentada, que también se utiliza en veterinaria; la telemedicina y, por último, Big Data en salud animal. Respecto a este último, ha apuntado “te permite adelantarte con la inteligencia artificial a lo que te va a suceder”.
La decana no ha dejado de apuntar que “hay que respetar el bienestar de los animales en todos los tratamientos de todas las nuevas tecnologías que utilicemos”.