Alsa proyecta “El Expreso de Canfranc”, un tren turístico que circulará inicialmente en primavera y verano entre las estaciones de Sabiñánigo, Jaca y Canfranc.
El operador de movilidad ha presentado en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) "El Expreso de Canfranc", que se engloba dentro de los trenes turísticos de Alsa y discurre paralelo al Camino de Santiago francés.
Tiene previsto operar tres frecuencias diarias por sentido, entre Sabiñánigo, Jaca, Castiello, Villanúa y Canfranc. La duración de todo el trayecto será de una hora aproximada, si bien las diferentes opciones de billete permitirán a los viajeros subir o bajar en cualquiera de las estaciones del recorrido.
El viaje se realizará en un convoy declarado como patrimonio histórico ferroviario, que ha sido restaurado íntegramente y estará compuesto por una locomotora de la Serie 316 de los años 50, única en nuestro país, que arrastrará hasta cuatro coches viajeros de los años 30 y un furgón para transporte de bicicletas.
Para ocasiones especiales, contará con la presencia de emblemáticos coches de la Compañía Internacional de Coches Camas (CWIL) en su formato cafetería. El tren dispondrá de una oferta de hasta 250 plazas por expedición.
Actualmente la línea desde Ayerbe a Canfranc está en proceso de renovación y no hay tráfico, unas obras que se prevé que concluyan entre abril y mayo.
Desde Alsa se indica que “El Expreso de Canfranc recorrerá un abrupto trazado, en el que, sin duda, el paisaje del valle del río Aragón se convierte en el gran protagonista, permitiendo el acceso a Canfranc y a su restaurada Estación Internacional, hoy transformada en hotel”.
Agrega que también posibilitará el acceso a Canfranc a turistas y montañeros de una forma sostenible, permitiendo iniciar sus rutas pirenaicas sin necesidad de viajar en coche particular.
El proyecto cuenta con el apoyo institucional del Gobierno de Aragón, de la Mancomunidad del Alto Valle del Aragón y de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles (FFE), y la participación de entidades como la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril (AZAFT) o la empresa Auxiliar de Patrimonio Ferroviario (ADEPF), que han puesto a disposición del proyecto el valioso patrimonio ferroviario.
Alsa es un referente en la operación de trenes turísticos desde que en 2017 iniciase la explotación del Tren de Felipe II que comunica Madrid y San Lorenzo de El Escorial, que se engloba dentro de la marca Trenes Patrimonio Mundial que promueve, junto con la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, la Comunidad de Madrid.