El Gobierno de Aragón ha aportado datos sobre la difícil situación por la falta de precipitaciones y escasa humedad del suelo que está afectando a todos los cultivos implantados en la comunidad autónoma, principalmente en los cereales de invierno y leguminosas de las zonas de secano, como poco porte, problemas en el espigado, falta de enraizamiento y arraigo, entre otras, y en plantaciones de viñedo, con problemas de brotación.
También se está viendo perjudicada la ganadería, fundamentalmente la extensiva de ovino, dado que la ausencia de precipitaciones está afectando al pasto disponible, lo que ha llevado a recurrir a compra de pienso y forraje. Asimismo, la falta de vegetación en los montes derivada de la escasez de lluvias puede afectar seriamente al sector apícola.
El Ejecutivo aragonés detalla que, mientras que los primeros meses de 2023 fueron fríos, el mes de marzo en Aragón es el tercero en el ranquin de marzos más cálidos desde 1961. La anomalía observada ha sido de +2,2 ºC con respecto a las normales de referencia (1991-2020). La tendencia durante la primera quincena de abril está siendo similar.
El carácter pluviométrico de marzo en Aragón está siendo muy seco, incluso extremadamente seco en las últimas semanas. En el pasado mes el porcentaje de precipitación promedió un 15 % con respecto a las normales de referencia. Así, se coloca cuarto en el ranquin de los más secos desde 1961, y abril está llevando la misma tendencia negativa.
La precipitación acumulada entre el 1 de marzo y el 12 de abril de 2023 en las tres provincias aragonesas no llega al 20 % de la mediana de la precipitación acumulada del periodo 1981-2010. En cuanto a las temperaturas, se han registrado valores máximos y mínimos diarios muy superiores -llegando a los 10 ºC- a las medias máximas y medias mínimas del periodo histórico.
El porcentaje de agua disponible en la capa superficial del suelo se encuentra actualmente entre el 0-10 % en todo el territorio aragonés, a excepción de la franja pirenaica, que alcanza un 50 %.
La línea de tendencia de la reserva hidráulica en Aragón se sitúa por debajo de la del último año y de los últimos 5 años. A fecha 10 de abril de 2023, la reserva hidráulica es un 20 % menor a la del año pasado y un 25% menor a la de los últimos 5 años.
Se observa una disminución generalizada del agua embalsada comparada con el agua almacenada hace un año y con la media de los últimos cinco años. A nivel global, hay una bajada del 14,5 % en el agua almacenada entre el 1 de abril de 2023 y 1 de abril de 2022 y del 23, 1% con la media del agua almacenada en los últimos cinco años.
En líneas generales, el último año la reserva de nieve se situó por debajo del promedio de los últimos 5 años y las aportaciones controladas también por debajo de la del año anterior y del promedio de los últimos 5 años. A 3 de abril, la reserva de nieve es un 60 % menos que el año pasado a la misma fecha y un 70 % menos que el promedio de los últimos cinco años.