Los padres y madres del CEIP Pedro J. Rubio de Huesca han iniciado una campaña de recogida de firmas para solicitar al Gobierno de Aragón que dote al centro de una cocina propia. La iniciativa, impulsada por la Amypa del colegio, denuncia la baja calidad del servicio de comedor actual, gestionado mediante un sistema de línea caliente por una empresa externa, y pide que se realicen las reformas necesarias para recuperar el modelo de cocina in situ.
Actualmente, en el centro están escolarizados 592 alumnos, de los cuales unos 300 utilizan el comedor. Según denuncian las familias, el catering concesionado "no busca la calidad ni una alimentación adecuada para los niños, sino el beneficio económico". Aseguran que los menús se basan en alimentos de baja calidad, con escasa presencia de verduras frescas y un uso frecuente de productos precocinados, salsas, grasas, sal y azúcar, lo que, a su juicio, puede derivar en problemas de salud a medio y largo plazo. Anteriormente el colegio disponía de cocina propia, pero se eliminó pasando a tener catering.
Además, apuntan que en muchas ocasiones las raciones son insuficientes y hay niños que se quedan sin algunos platos o sin postre. También critican que el menú que se entrega a las familias no siempre se corresponde con lo que realmente se sirve en el comedor, especialmente en lo que respecta a guarniciones y acompañamientos.
La Amypa realizó recientemente una encuesta entre sus socios, en la que el 80 % de las familias manifestó estar descontenta con el servicio actual. Algunas incluso han decidido prescindir del comedor escolar y buscar alternativas por su cuenta ante la falta de confianza en la alimentación que reciben sus hijos e hijas en el colegio.
Las familias comparan la situación de su centro con la de otros colegios públicos de Huesca que sí disponen de cocina propia. En estos, aseguran, se sirven verduras frescas varias veces por semana y platos principales como salmón, bacalao, pechuga de pollo o estofado de ternera, muy lejos de la oferta del catering que reciben en el Pedro J. Rubio.
"Todas las familias pagamos lo mismo por el comedor escolar, por lo que entendemos que el servicio y la calidad también deberían ser iguales", afirman desde la Amypa. Por ello, han iniciado esta campaña de firmas para exigir a la administración autonómica una solución urgente a lo que consideran una situación de desigualdad y de perjuicio para sus hijos e hijas.