La Guardia Civil llevó a cabo este pasado lunes el desalojo de un antiguo hotel sin actividad en Candasnos, en el que residían temporeros en condiciones precarias. La operación "está abierta y en proceso de investigación", ha informado la Benemérita.
El edificio, ubicado en la N2, estaba cerrado oficialmente como establecimiento hotelero y se utilizaba para alojar a trabajadores migrantes que pagaban por una cama. Según la información difundida por Aragón TV, el espacio acogía a más de un centenar de migrantes de distintas nacionalidades en situación de hacinamiento y se ha detenido a una persona.
Tras el desalojo, los afectados fueron trasladados al pabellón municipal de Candasnos, en un dispositivo coordinado por la Guardia Civil, Protección Civil y Cruz Roja. En el pabellón se han habilitado camas y enseres para acoger de forma temporal a los temporeros y han recibido ayuda los servicios sociales de la comarca del Bajo Cinca, el Ayuntamiento de Candasnos, Cruz Roja, Protección Civil y los vecinos.
