La Guardia Civil tuvo que rescatar el pasado martes un perro que, persiguiendo a un animal, se había precipitado 30 metros en el parque de Ordesa. Tras auxiliar al animal, al que tuvieron que evacuar a hombros, sus dueños recibirán una sanción por infringir la normativa que obliga a llevar a los perros atados.
Cuando paseaba con su propietario por la zona del cañon de Añisclo, en Fanlo, el perro, que seguía el rastro de un animal, se precipitó 30 metros y quedó inmovilizado. Al no poder sacarlo por la dificultad del terreno, el dueño solicitó la ayuda.
A la zona acudieron especialistas del Greim de Boltaña que localizaron al perro y pudieron ponerlo a salvo. Como estaba muy nervioso y con sangre en las patas, los agentes tuvieron que evacuarlo a hombros hasta el vehículo de sus propietarios para que lo trasladaran a un centro veterinario.
Debido a que no iba sujeto con correa dentro de Ordesa, los dueños fueron informados de que iban a proponer para sanción ante el Servicio Provincial de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente por una posible infracción de los decretos que prohíben la introducción de perros sueltos en el parque nacional.
Este rescate se llevó a cabo el pasado martes, cuando también se auxilió a una senderista de 54 años, procedente de Gipuzkoa, que sufrió una caída en el sendero de las Foyas, en las inmediaciones de Acherito, y que presentaba una posible fractura. Fue evacuada de la zona por el Greim de Jaca y el helicóptero, que la trasladó hasta el Hospital San Jorge.
También fue auxiliado el martes un vecino de Madrid, de 50 años, que se lesionó descendiendo del ibón de las Llosas y se encontraba en el refugio Coronas. Fue trasladado por el Greim al centro de salud de Benasque.
Por otra parte, el pasado domingo, agentes del Greim de Jaca acudieron a Llano del Sol, una zona de pistas de la estación de Astún donde un vecino de Zaragoza, de 35 años, había sufrido una caída. El herido fue descendido en trineo hasta el vehículo de un familiar que le acompañaba para que fuera valorado en el Hospital de Jaca.
El sábado se realizaron dos actuaciones más. Uno de ellos en el mallo Pisón, en la vía Bailando con Bolos, de Riglos, donde dos escaladores, un varón de 23 y una mujer de 25 años vecinos de Madrid, se habían desorientado de la línea de rappel debido a la niebla. Especialistas del Greim de Huesca los fueron orientando hasta que descendieron ilesos a la base.
Asimismo, especialistas del Greim de Benasque salieron a pie a buscar a dos montañeros de Barcelona, de 52 y 53 años, que no regresaron al refugio de Cap de Llauset, en Montanuy, como estaba previsto. Ambos fueron localizados en buen estado en el refugio de Angliós.