Un montañero croata de 36 años resultó herido el pasado martes en la escupidera de Monte Perdido, tras precipitarse 30 metros y sufrir una fractura en una pierna. La operación de rescate de la Guardia Civil se complicó debido a las fuertes rachas de viento que impidieron acceder al helicóptero, por lo que los especialistas de montaña tuvieron que llegar a pie y portar al herido en camilla hasta el punto donde, en varios intentos, pudo ser recogido por la aeronave.
El aviso a través del 112 lo dio un montañero que cuando realizaba la ascensión al pico de Monte Perdido desde Góriz se encontró en las inmediaciones del Lago helado dentro de la escupidera, en Fanlo, a otro montañero que sufría una posible fractura en la pierna derecha a causa de una caída de unos 30 metros.
Iniciaron el rescate el helicóptero de la Guardia Civil de Huesca, agentes del Greim de Boltaña y un médico del 061, pero les fue imposible acceder a la zona por las fuertes rachas de viento. De esta forma, los especialistas acudieron a pie hasta el accidentado desde el refugio de Goriz, ascendiendo por una pendiente de 800 metros de desnivel, y tuvieron que solicitar apoyo a dos miembros del Greim de Benasque, ya que esta unidad cuenta con una camilla UTE 2000 para poder evacuar al accidentado de la forma más segura.
Una vez inmovilizado e introducido en la camilla, iniciaron el descenso por un terreno vertical hasta una zona donde la tripulación del helicóptero, tras varios intentos fallidos por las fuertes rachas de viento, pudo acercase para proceder a la evacuación del herido -que fue trasladado al Hospital San Jorge- y los dos especialistas. Los otros dos miembros de los Greim pasaron la noche en el refugio de Góriz.
Recientemente, un montañero valenciano de 49 años falleció al caer por la escupidera de Monte Perdido.