Las familias del alumnado del aula de escolarización anticipada de 2 años del CEIP El Parque de Huesca han dirigido una carta a la Directora Provincial de Educación del Gobierno de Aragón para expresar su “profunda preocupación” por la situación que atraviesa el aula, agravada en los últimos días por la coincidencia de dos ausencias: la prolongada falta de la Técnico de Educación Infantil y la baja temporal de la tutora. Este jueves se han concentrado ante la sede de Educación para hacer la entrega de la misiva a la directora provincial, Mónica Martínez.
En el escrito, fechado el 16 de octubre, las familias advierten de que esta doble ausencia está provocando “un grave perjuicio en la atención diaria y el bienestar de los niños y niñas”, y denuncian que el aula está siendo atendida “por personal del centro que no cuenta con la formación específica necesaria para estos puestos”.
Subrayan además que muchos de los pequeños “ni siquiera han cumplido los dos años” y que el vaivén de adultos distintos cada jornada genera un ambiente de inseguridad y desconfianza en un momento crucial del curso escolar.
“Nuestros hijos e hijas van a estar atendidos por personas que ni siquiera conocen y que desconocemos si cuentan con la formación necesaria para estos puestos”, lamentan las familias, que califican de “insostenible” la situación actual.
Aunque agradecen el esfuerzo del equipo docente y del personal del centro, reconocen que “la falta de esta figura profesional imprescindible —y de la tutora temporalmente— está afectando al bienestar y desarrollo de los pequeños, así como a las condiciones de trabajo del personal que intenta suplir su ausencia”.
El colectivo recuerda que la atención en el aula de 2 años requiere un personal mínimo y adecuado “para garantizar la seguridad, el cuidado y el desarrollo emocional” de los niños, y sostiene que la situación actual no cumple esas condiciones básicas.
Por todo ello, solicitan la cobertura urgente de la plaza vacante de Técnico de Educación Infantil y reclaman ser informadas sobre el estado del proceso de sustitución. También piden que se revisen los procedimientos para evitar que una situación similar vuelva a repetirse en el futuro.
“La situación actual no puede prolongarse más tiempo sin una respuesta o solución efectiva”, concluyen las familias, apelando a la sensibilidad de la administración educativa ante un problema que afecta directamente al bienestar de los más pequeños.