La nieve está llegando en abundancia a las estaciones de esquí del Pirineo altoaragonés e incluso ha obligado al uso de cadenas en el Portalet, en la A-136 y en Bielsa, en la A-138.
Desde las estaciones muestran su satisfacción por la que esperan que sea “la primera gran nevada de la temporada”, como indican desde Astún-Candanchú, al igual que Formigal-Panticosa desde donde se muestran emocionados con la nieve que está cayendo en las últimas horas en su territorio. También Cerler y Benasque está recibiendo estos primeros copos que hacen soñar a los amantes de los deportes de la nieve con una buena temporada.
Todas ellas animan a adquirir el abono para disfrutar de la temporada, algo que en vista de las altas temperaturas con las que había empezado el otoño y la sequía que se arrastra no se vislumbraba cercano.
El tiempo ha cambiado y las temperaturas han marcado mínimas de -5,3 grados en Astún-La Raca y -4,8 en Cerler-Colluga, y algo más elevadas pero todavía bajo cero en Panticosa (-1,7) y Formigal (-1,5).
La Agencia Estatal de Meteorología sitúa la cota de nieve en torno a los 1400-1600 metros, con acumulaciones de nieve abundantes en cotas altas. Para este sábado no se descartan precipitaciones débiles por la mañana a primeras horas en la divisoria del Pirineo, con la cota de nieve manteniéndose en torno a 1400-1600 metros.