El Pirineo oscense ha amanecido este jueves con un paisaje plenamente invernal. Las nevadas registradas durante la madrugada han dejado un manto blanco en muchas zonas altas, con la cota de nieve descendiendo hasta los 1.800 metros.
Según los datos recogidos por los refugios de montaña, la mayor acumulación se ha registrado en el Refugio de Cap de Llauset, con 12 centímetros de nieve, seguido del Refugio de Estós, que ha contabilizado 10 centímetros. En Góriz se han medido 6 centímetros y en el Refugio de los Ibones de Bachimaña, 5 centímetros.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé que este episodio continúe en las próximas jornadas. Para mañana viernes, se esperan precipitaciones débiles o localmente moderadas, que tenderán a generalizarse a últimas horas. La cota de nieve se situará inicialmente en torno a los 1.800 metros, subiendo por encima de los 2.500 durante las horas centrales del día y descendiendo después hasta 2.000 o 2.200 metros al final de la jornada.
El sábado, la cota volverá a bajar desde unos 2.200 hasta 1.800 metros, mientras que el domingo se prevén precipitaciones débiles de madrugada en la divisoria, que serán en forma de nieve por encima de los 1.600 metros.
