El delegado de la Aemet para Aragón, Rafael Requena, ha explicado que el verano ha sido muy cálido y muy húmedo con tormentas a finales de agosto y primeros días de septiembre de carácter equiparable a las lluvias tropicales.
La delegación en Aragón de la Agencia Estatal de Meteorología dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) ha presentado este lunes su balance climático correspondiente al verano, con una anomalía de +1,3 ºC respecto al promedio del período de referencia 1991-2020.
Por meses, junio fue normal y julio y agosto fueron muy cálidos. La distribución espacial de estas anomalías muestra un rango de valores entre +0,6 ºC -en Caspe- y +2,9 ºC -en Valderrobres- respecto a las normales climatológicas del periodo. Estos valores sitúan el verano de 2024 como el quinto más cálido desde que hay registros en 1961. El primero fue el de 2022, con una anomalía de +2,7 ºC.
La ciudad de Zaragoza alcanzó su temperatura mínima más alta de la serie histórica el 30 de julio, con los 28,1 ºC registrados en la estación de AemetT en el Aeropuerto de Zaragoza. Se trata de una cota muy superior al anterior récord, del año 2023, cuando el 23 de agosto se alcanzaron los 25,7 ºC, primera vez que Zaragoza no bajó de los 25 ºC y tuvo una noche ecuatorial.
En cuanto a precipitaciones, los porcentajes de precipitación acumulada en el pasado trimestre con respecto a las medias de referencia (1991-2020), presentan un promedio del 124% y un carácter húmedo.
Por meses, junio fue húmedo, julio fue seco y agosto fue muy húmedo. La distribución espacial de estas anomalías oscila entre totales pluviométricos, en relación a la normal, de alrededor del 51 % en Andorra y del 254 % en La Almunia de Doña Godina, con un superávit promedio de +26 mm para toda la Comunidad.
Requena ha destacado que las lluvias en agosto, por su coincidencia con temperaturas cálidas y sus características en cuanto a desarrollo -puntuales y muy efectivas, con mucha agua en poco tiempo- pueden considerarse “de carácter tropical”.
AÑO AGRÍCOLA
El cierre del año agrícola (del 1 de septiembre de 2023 al 31 de agosto de 2024), permite ofrecer ya su balance meteorológico. Los porcentajes de precipitación acumulada con respecto a la media de referencia (1991-2020) presentan para el conjunto de Aragón un valor promedio del 101 % y un carácter ligeramente húmedo. La variación en su distribución territorial oscila entre totales pluviométricos, en relación a la normal, del 51 %, en Andorra, y del 170 % en Sos del Rey Católico, con un superávit promediado de + 4 mm para toda la Comunidad. En temperatura, este ha sido el año agrícola más cálido de la serie con una anomalía positiva de +1,7 ºC
PREDICCIÓN ESTACIONAL
El trimestre conformado por los meses de septiembre, octubre y noviembre, coincidente aproximadamente con el otoño astronómico que comenzó este 22 de septiembre, será muy probablemente más cálido de lo normal en Aragón, con una probabilidad del 60% de encontrarse en el tercil superior. En cuanto a las precipitaciones, el trimestre podría mantenerse dentro de lo normal, aunque en este caso las probabilidades de que se sitúe en la media, por encima o por debajo están igualadas.
En todo caso, las primeras semanas de septiembre están arrojando precipitaciones por encima de lo habitual en las provincias de Huesca y Teruel. Destaca especialmente el caso de Huesca, en la que, tomando de referencia las mediciones del aeropuerto, se han registrado en lo que va de septiembre 111,6 mm, frente a los 48 mm de la precipitación normal (periodo 1991-2020).