La República Monegría ya luce su icono animal en lo más alto: un camello de acero de mil kilos

El complejo de Tardienta homenajea a los dos camellos que trajo del Sáhara mientras el proyecto evoluciona con vistas a un nuevo hotel y a una pista más larga del aeródromo

11 de Junio de 2025
Guardar
José Manuel Ayuda con el camello de la República Monegría.
José Manuel Ayuda con el camello de la República Monegría.

La República Monegría, constituida hace 33 años por José Manuel Ayuda en el que es conocido como Aeródromo de Tardienta, ha erigido en lo más alto de sus predios el emblema que define su territorio. Como muchos países, ya tiene desde este martes el animal icónico que enorgullece a sus habitantes y a los visitantes que se alojan en el Hotel La Cueva: un camello de mil kilos de peso, de chapa de acero, instalado en un montículo de tal guisa que se ve desde todos los confines de la república.

José Manuel Ayuda explica la razón identitaria y sentimental que le ha conducido a colocar el macro camello. "Es un homenaje a los camellos que traje del Sáhara hace 28 años. Es un icono, como el toro de Osborne, pero en camello de los Monegros. Conforme vaya avanzando, iré poniendo más camellitos. Quiero que sea una escultura que vaya poco a poco evolucionando en más camellos".

La República Monegría ya tiene su icono.

La instalación ha sido trabajosa. La maquinaria y el personal de Construcciones Luciano de Tardienta, dirigida por el propio Luciano y por José Manuel Ayuda, traslada desde el meollo de la República de Monegría, junto a la entrada del Hotel La Cueva, el gran camello cuidando todos los detalles hasta el montículo que perpetúa la efigie. "El símbolo de la República es de chapa de diez milímetros y la idea es que se vaya oxidando con el tiempo para que coja el color de un camello, camel, marrón, que irá evolucionando cada año. Esperemos que aguante cien años y que soporte el cierzo".

Logo WhatsApp
Suscríbete a nuestro canal de WhatsApp para tener la mejor información

Treinta y tres años, una vida de Jesucristo, desde que comenzó José Manuel Ayuda "con los aviones, los hangares, el aeródromo, hasta ahora. Ha sido una evolución: empecé de instructor de vuelo y he acabado de camellero. ¡Las vueltas que da la vida!".

Una de sus instalaciones estrella, el Hotel La Cueva, va "muy bien, tenemos muchos clientes extranjeros y reservas a veces con un año de antelación. Mucho cliente francés que viene de propio porque han oído hablar". Los clientes gozan con el Pájaro Uyuyuy o con los paseos con ese velero llamado libertad, al estilo de Perales, con el que se recorre la estepa monegrina.

Las actividades deportivas y aéreas son frecuentes. Recientemente, acogió el Campeonato de España de Tiro de Precisión y maniobras militares. También recibe recreaciones históricas. "Somos un centro de acogida de ideas, cuanto más locas mejor. Acojo aquí todo aquello a lo que otros no se atreven o no quieren hacerlo. Si cuadra, lo vamos haciendo".

Un lamento: en torno al aeródromo, "todo son problemas. Tengo la ampliación de pista a 1,5 kilómetros desde hace cuatro años parada por culpa de la burocracia. Este país es un desastre en este sentido, las cosas así no funcionan, no evoluciona un país. Está todo burocratizado, lleno de burócratas".

42a3c8fd a262 428a a3da 699931613e2d
42a3c8fd a262 428a a3da 699931613e2d

En la cabeza de José Manuel Ayuda, que es una turbina a mil revoluciones, proyectos que le fascinan como "El marcianico feliz", el hotel-ovni de cuatro plantas que tiene proyectado pero que habrá de esperar a las mejores condiciones financieras para ser afrontado.

En medio de sus audacias, una convicción acompaña el día a día de José Manuel, que es cantada cuando uno abandona el recinto y escucha, en el contestador que abre la puerta, aquello de que "La República Monegría resiste y resistirá". Por algo ha sido cantada por Virgilio Aljama, el inspirador musical de los Monegros.

Archivado en

Suscríbete a Diario de Huesca
Suscríbete a Diario de Huesca
Apoya el periodismo independiente de tu provincia, suscríbete al Club del amigo militante