El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha informado este jueves de que avanza en la ejecución de las obras de acondicionamiento de la carretera N-260 en el tramo comprendido entre Congosto de Ventamillo y Campo, y que es necesario el corte total de la carretera al tráfico en el tramo comprendido entre las poblaciones de El Run y Campo desde el lunes 2 de septiembre a las 0.05 hasta el viernes 11 de octubre a las 14.00.
El corte se levantará durante los dos primeros fines de semana de septiembre: desde el viernes 6 a las 14.00 horas hasta el lunes 9 a las 7.00, y desde el viernes 13 a las 14.00 hasta el lunes 17 a las 7.00.
En todo momento, afirma el ministerio, quedará asegurada la accesibilidad a Seira en los términos acordados con los vecinos de los tres núcleos de población situados en el entorno afectado, en concreto Seira, Abi y Barbaruens.
De este modo, "se garantizará que pueda accederse a dichos núcleos a través de la propia carretera N-260, desde el norte o sur en función de en qué tramos de la obra se esté trabajando en cada momento, e indicando los itinerarios alternativos por Benabarre o Castejón de Sos, que serán convenientemente señalizados". En cualquier caso, se permitirá circular por la carretera, tanto hacia el norte como hacia el sur, en caso de emergencia.
QUEJA DEL GOBIERNO DE ARAGÓN
Minutos antes del comunicado informativo del ministerio, el Gobierno de Aragón ha trasladado públicamente su "lamento por la falta de información y de atención" a los municipios afectados por el corte del tramo Congosto de Ventamillo-Campo de la N-260. Una actuación que comenzará el próximo 2 de septiembre, "a pesar de que los ayuntamientos afectados siguen esperando respuesta a las demandas trasladadas en su día para retrasar durante dos semanas estas actuaciones".
Desde el Departamento de Fomento, Vivienda, Logística y Cohesión Territorial del Gobierno de Aragón se manifiesta también el "malestar por esta actitud y por la nula comunicación con el Ejecutivo autonómico" para poder coordinar actuaciones que aminoren al máximo las afecciones que provocan este tipo de obras. Consideran que la “lealtad y la colaboración institucional” debe imperar en las relaciones entre ambas administraciones y en este caso “ha brillado por su ausencia”.
Asimismo, quieren dejar constancia de que el cierre temporal de la N-260 en ese tramo tiene aparejadas una serie de consecuencias que no se pueden desdeñar. “Se verán afectadas también carreteras autonómicas, deberíamos haber trabajado conjuntamente en definir y analizar los flujos de tráfico, es fundamental acometer refuerzos de señalización y también poner en marcha medidas para garantizar la seguridad ante el exceso de tráfico que se va a producir en otras vías”, han incidido.
Obras de este calado, que supone también el cierre de una vía de comunicación fundamental, requiere asimismo para el Gobierno de Aragón de una “intensa campaña de comunicación” a los ayuntamientos, asociaciones empresariales y comercios. En contraste con ello, han criticado, ha imperado la “ley del silencio”.
IMPORTANCIA DEL TURISMO
El Gobierno de Aragón ha recibido en las últimas horas un gran volumen de quejas por parte de los habitantes del territorio porque las afecciones que va a provocar el cierre de este vial de acceso al valle de Benasque van a ser cuantiosas. Muy especialmente en unas fechas en las que todavía es numeroso el flujo de visitantes que deciden visitar ese enclave de la provincia de Huesca.
Por esa razón, quieren insistir en la necesidad de “escuchar al territorio”, que reclama “con toda la razón” que las actuaciones se pospongan durante unas semanas para que no se produzcan más problemas a los visitantes y vecinos, además de provocar un efecto desincentivador para los que tienen previsto visitar esos municipios, llevándoles incluso a desistir ante los problemas en los desplazamientos.