Alrededor de 50 profesionales del sector primario han participado este miércoles en la Jornada de Transferencia de Cereal de Invierno, organizada por el Secadero de Cereales Santiago de Grañén en una parcela experimental ubicada en Fraella. El objetivo del encuentro ha sido compartir los primeros resultados de los ensayos en microparcelas con distintas variedades de cebada maltera y trigo extensible, adaptadas a las condiciones agroclimáticas de Los Monegros.
La jornada ha comenzado con un almuerzo de bienvenida y ha continuado con una visita a la finca experimental, donde el secadero colabora con Red Arax (Red Aragonesa de Cultivos Extensivos y Leguminosas) en el seguimiento técnico. En total, se han sembrado 17 variedades de cebada maltera y 9 de trigo extensible, cuyas características se están evaluando con parámetros como la germinación, el espigado y la tolerancia a enfermedades.
“Estas pruebas nos están permitiendo comprobar la adaptación de cada variedad a nuestras condiciones locales, con el fin de tomar decisiones mejor fundamentadas para las próximas campañas”, ha explicado Ángel Mainer, técnico del Secadero de Cereales Santiago, junto a Ana Sanz, también técnica del centro.
El gerente de la SAT de Grañén, Mariano Ordás, ha valorado muy positivamente la jornada como punto de encuentro entre agricultores y empresas. “Son importantes porque permiten ver las diferentes opciones que tienen nuestros agricultores a la hora de lograr un mejor rendimiento económico. Aquí hemos reunido ejemplos de todas las variedades que ofrece el mercado en cebadas y trigos”, ha afirmado.
Desde Red Arax, Ana Sanz ha señalado que esta ha sido la primera jornada de cereal de invierno realizada en colaboración con la red y ha mostrado su intención de continuar en futuras campañas. “Está siendo un trabajo muy provechoso que nos servirá para asesorar mejor a nuestros agricultores”, ha dicho.
También ha participado Miguel Gutiérrez, responsable de la unidad técnica del Centro de Transferencia Agroalimentaria del Gobierno de Aragón, quien ha destacado la importancia de estas acciones para “transferir conocimiento desde la empresa al sector y facilitar la toma de decisiones”. En su intervención, ha subrayado que esta colaboración “puede convertir al secadero en un punto de referencia que genere información útil para todos”.
Al finalizar la campaña, el equipo técnico del secadero elaborará un dosier técnico con los resultados finales, en el que se incluirá la producción obtenida por cada variedad. Entre las variedades de cebada maltera evaluadas están Thalis, Pewter, Planet, Lexy, Andante, Belcanto o Solar, y entre las de trigo extensible, nombres como Tocayo, Sofru, Ippon, Alteo o Machado.