Los setos de las medianas de la autovía A-23 y de la A-22 en dirección Huesca-Zaragoza y Barbastro-Lérida han sido arrancados por decisión del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana con el objetivo de ahorrar los mantenimientos, tal y como se puede apreciar ya en las dos vías.
Los setos se justifican por motivos de seguridad, entre ellos evitar el deslumbramiento nocturno producido por los faros de los vehículos que circulan en sentido contrario al nuestro y ejercer el efecto barrera que disipa la energía del vehículo en salidas de la calzada, además de generar más sensación de sosiego al conductor por la integración paisajística de la carretera en el entorno. También se han descrito la disminución de la contaminación difusa del agua de la calzada hacia los márgenes de la carretera.
Significa que contribuyen no sólo a reducir el peligro de accidentes sino también a minimizarlos. Eso sí, demanda un mantenimiento de recorte de setos de la mediana que al parecer el Ministerio ha querido ahorrar sin contemplar los beneficios que las adelfas (habitualmente es el arbusto elegido) tienen en el plano de la seguridad, singularmente en horarios de áxima confluencia en las vías como sucede prácticamente todos los domingos entre Huesca y Zaragoza en horario nocturno en el que evita el deslumbramiento entre los dos sentidos.
Los mantenimientos hay que realizarlos con cierta asiduidad, según indican fuentes de la Demarcación de Carreteras del Estado en Aragón, que señalan el aspecto económico para la erradicación de estos setos.