El Gobierno de Aragón no acudirá al grupo de trabajo para analizar el traslado de las pinturas murales al Monasterio de Villanueva de Sijena y ha considerado, además, que los catalanes "llevan implícita la voluntad de no cumplir" la sentencia del Tribunal Supremo.
La consejera de Educación, Cultura y Deporte, Tomasa Hernández, ha estimado "inaceptable esta postura de manifestar que es de imposible cumplimiento la sentencia porque dice que las pinturas sufrirán unos daños irreparables. En primer lugar, se trata de un tema que ya se debató en la instancia, quedó zanjado y se dice en la sentencia quién es el titular de las pinturas y dónde deben estar. Y, para decir que las pinturas deben estar en Sijena, se ha considerado la circunstancia del desmontaje en el MNAC y transporte en el MNAC".
Sobre el escrito del Museo catalán, afirma que "no contempla ningún plazo para cumplir la sentencia, es una voluntad implícita de no cumplir. Nosotros, desde el Departamento, hemos tenido voluntad de colaboración con este grupo de trabajo que en principio ponían en funcionamiento no para discutir si las pinturas se podían o no trasladar, sino para ver cómo se trasladaban.Cuál era la forma y el tiempo para trasladarlas y restituirlas a la Sala Capitular del Monasterio de Sijena".
Desde la perspectiva del Gobierno de Aragón, "han roto desde nuestra óptica cualquier clima de confianza. Llevan la voluntad implícita de no cumplir. Y la del Gobierno de Aragón va a ser que se cumpla la ley con todos los medios judiciales que tengamos a nuestro alcance. No aceptamos más que el cumplimiento íntegro de la sentencia que condena al MNAC a devolver todas las pinturas, las de la Sala Capitular y las profanas. No vamos a aceptar maniobras dilatorias de esta índole".
Y, en consecuencia, ha culminado la consejera, "el Gobierno de Aragón no asistirá a grupo de trabajo, hasta que no cambie la actitud del MNAC"