La nieve ha llegado al Pirineo gracias a la bajada de temperaturas y a la borrasca Aline. El frente, que dejó lluvias excepcionales el jueves, también ha permitido que una fina capa de nieve cubra algunas zonas, llegando hasta Astún y Candanchú.
La borrasca dejó el pasado jueves lluvias excepcionales en el Pirineo, que persistieron de madrugada con alguna precipitación de nieve en cotas altas, por encima de unos 2200 metros. La bajada de temperaturas ha permitido que descendiera para dejar un ligero manto en estaciones de esquí como Candanchú. Este sábado la cota de nieve se ha situado en torno a 1700 metros.
Las imágenes de la las webcams de los refugios de la Federación Aragonesa de Montañismo y las publicadas en sus redes sociales por Candachú, muestran esta ligera nevada, que anuncia que se acerca la temporada de esquí.
El calor del mes de septiembre y principios de octubre ha retrasado la llegada de la nieve en las cumbres. La cota vuelve a situarse en los tresmil este domingo, e irá descendiendo hasta los 2100 metros este martes.