Producción histórica de almendra acompañada de unos precios en demolición

Antonio Lasheras explica que la cosecha de récord va acompañada en Huesca por un bajo calibre y una difícil sostenibilidad de las rentabilidades

23 de Septiembre de 2023
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Producción histórica de almendra acompañada de unos precios en demolición. Foto Joaquín Santafé
Producción histórica de almendra acompañada de unos precios en demolición. Foto Joaquín Santafé

Una cosecha excepcional en volumen contrarrestada por una calidad inferior y unos precios en desplome. Los agricultores dedicados a los frutos secos, y principalmente a la almendra (en Aragón son 70.000 hectáreas, un buen porcentaje de las cuales está en la provincia de Huesca), están trabajando a destajo porque la recolección les exige el esfuerzo propio de quien ha de aprovechar el momento para rentabilizar las explotaciones.

Es el caso de Antonio Lasheras, presidente de la SAT Agrícola del Norte, que lleva al frente del asociacionismo agrario del sector en nuestra provincia nada menos que siete lustros en los que ha recibido multitud de reconocimientos. Los laureles, sin embargo, quedan a un lado cuando toca remangarse y, de hecho, la intensidad de su esfuerzo con 75 años es hercúlea. Define en una frase rotunda la realidad de hoy: "La cosecha es excepcional pero los precios están por los suelos". La estimación nacional para 2023-24 era de 130.000 toneladas de almendra grano pero la sequía después del truculento verano la ha dejado en 115.000. En todo caso, es una nueva "cosecha récord en España".

Dentro del contexto español, Aragón se sitúa en cabeza fundamentalmente por el empuje del "regadío que ha provocado un aumento muy importante en el Cinca Medio, en el Bajo Cinca, en todas las tierras regadas por el Joaquín Costa y La Sotonera, con plantaciones muy importantes y con buena rentabilidad en localidades como Gurrea de Gállego. Sin embargo, los secanos están en deterioro por falta de atención, por carencia de relevo generacional y porque la sequía completa un escenario preocupante. De todos modos, en cuanto a producción, lo compensa el regadío con creces",

Las 70.000 hectáreas aragonesas propician una producción de 35.000 toneladas aproximadamente, casi el treinta por ciento del global de España. En nuestra provincia el problema es "la calidad, no tenemos unos calibres aceptables para ponerlos en los lineales y que tengan una vistosidad, lo que repercute en el precio. Principalmente, nuestra almendra va a harinas, triturados y mazapanes en un buen porcentaje".

Última asamblea de la SAT Agrícola del Norte
Presentación del libro de Antonio Lasheras

Los precios son hoy un problema importantísimo que se agrava por la competencia desde el exterior. "Estamos parecidos a 1989, cuando este sector sufrió una gran crisis. Los americanos tenían una gran producción y han introducido en el mercado grandes cantidades a 2 euros, en el caso de la nueva 2,5 euros. Alemania o Francia han reducido las importaciones de nuestras almendras y la media ha bajado de 8 a 5 euros el kilo".

La Sociedad Agrícola de Transformación que preside coordina unas cuatrocientas explotaciones de las provincias de Huesca, Zaragoza, Lérida, Gerona y Barcelona, unas cinco mil hectáreas. En nuestra provincia, se distribuyen en las comarcas de La Hoya, Ribera del Gállego, Litera, Cinca Medio y Bajo Cinca. "El trabajo de la SAT favorece un sistema de comercialización óptimo desde hace décadas, pero ahora mismo ha tocado techo y los precios van hacia abajo. Yo siempre digo que el mercado es simple. Si hay mucha oferta, bajan los precios. Si la demanda sobrepasa la oferta, suben los precios".

A la hora del resumen, una expresión contundente: "Gran cosecha en cantidad pero de poca calidad, sin el tamaño adecuado para lo que quieren los mercados y con los precios por los suelos". La experiencia permite leer sencillamente los renglones torcidos de la agricultura.

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