Alma Literana celebra 100 años de homenaje al folclore y como estandarte de Tamarite

La agrupación folclórica más antigua de Huesca conmemora su centenario con un programa cultural que abarca música, historia y memoria colectiva

16 de Mayo de 2025
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Esther Rivera, Alba Rivera, Carlos Sampériz y Mario Lax. Foto Myriam Martínez
Esther Rivera, Alba Rivera, Carlos Sampériz y Mario Lax. Foto Myriam Martínez

Alma Literana, la primera agrupación folclórica constituida en la provincia de Huesca, celebra su centenario con un completo programa conmemorativo que pone en valor un siglo de dedicación a la difusión y preservación de la jota aragonesa. El acto de presentación de estos actos se ha llevado a cabo este viernes, en la sede de la Diputación Provincial de Huesca, con la participación del diputado de Cultura, Carlos Sampériz, el concejal de Tamarite de Litera Mario Lax y dos integrantes del grupo: las hermanas Alba y Esther Rivera.

Durante la rueda de prensa, Carlos Sampériz ha subrayado la relevancia cultural de Alma Literana y ha destacado su admirable permanencia a lo largo del tiempo. En sus palabras, “no es fácil que un grupo folclórico haya alcanzado los cien años”, aunque ha celebrado que la agrupación “lo ha hecho en unas condiciones de salud inmejorables”. También ha recordado que el colectivo fue fundado en 1925 y que, desde entonces, se ha consolidado como un emblema cultural de Tamarite y de toda la provincia de Huesca.

El diputado también ha ensalzado el papel de Alma Literana en la proyección exterior del folclore aragonés. Según ha señalado, el grupo “ha llevado la jota a todos los rincones de Aragón, de España y fuera de nuestras fronteras”, lo que ha contribuido a dar visibilidad al nombre de Tamarite de Litera. Asimismo, ha relacionado esta efeméride con el actual impulso del Gobierno regional para que la jota sea declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, aspiración que hoy continúa viva.

Mario Lax. Foto Myriam Martínez
Mario Lax. Foto Myriam Martínez

Por su parte, el concejal Mario Lax ha reafirmado el respaldo del Ayuntamiento de Tamarite a esta conmemoración y ha reconocido a todas las personas que han formado parte del grupo. Ha expresado su emoción al hablar de una cifra tan redonda: “cien años, un siglo... una historia que impresiona”. En su intervención, ha subrayado el valor simbólico de Alma Literana como estandarte de la identidad local.

Lax también ha recordado la labor educativa y social de la agrupación, que ha sabido transmitir la pasión por el folclore de generación en generación. En sus palabras, “cada actuación es un homenaje vivo al folclore”, y ha añadido que tradición y modernidad conviven hoy gracias al compromiso de quienes mantienen vivo este legado.

Desde el Ayuntamiento, además, se ha reiterado el compromiso con la cultura popular, reconociendo a Alma Literana como “un pilar fundamental de nuestra identidad”. Esta celebración ha sido acogida con orgullo como reflejo de un siglo de historia, arte y comunidad.

Alba Rivera. Foto Myriam Martínez
Alba Rivera. Foto Myriam Martínez

La integrante Alba Rivera ha expresado su reconocimiento a todas las personas que han participado en la historia del grupo, ya sea desde sus diferentes secciones o colaborando con generosidad y entrega.

También ha transmitido su agradecimiento a la Diputación Provincial de Huesca y al Ayuntamiento de Tamarite de Litera por su respaldo constante.

La jotera ha recordando que la fundación de la primera rondalla en 1925 marcó el inicio de una trayectoria que sigue viva. Ha afirmado que aquella formación fue “el corazón palpitante de una tradición cultural que ha sabido trascender de generación en generación”. A lo largo de su historia, Alma Literana ha sabido integrar danza, música y literatura en un todo coherente.

Ha destacado que la rondalla ha recorrido Europa representando la jota y ha permitido que la tradición continúe transmitiéndose. Entre los nombres propios, ha mencionado a Teresa Benavides, profesora de baile y Premio Extraordinario del Certamen Oficial de Zaragoza, referente absoluto en su disciplina.

También ha tenido palabras de recuerdo para quienes ya no están pero han sido pilares fundamentales en la historia del grupo y ha proclamado que Alma Literana sigue siendo un espacio de encuentro entre generaciones pasadas y futuras, gracias a su capacidad para adaptarse sin perder sus raíces.

Por último, se ha referido al cartel conmemorativo del centenario, obra de Conchita Used, profesora de la escuela de dibujo de la asociación. La imagen incluye la bandera y la silueta de Aragón, el campanario del pueblo y la jota de Tamarite como símbolos de identidad compartida.

Esther Rivera. Foto Myriam Martínez
Esther Rivera. Foto Myriam Martínez

Esther Rivera ha detallado el programa de actos, señalando que las actividades ya comenzaron en abril, coincidiendo con San Jorge, con una misa baturra y una comida popular. Sin embargo, ha indicado que “es ahora cuando se concentran los eventos más significativos”.

Este sábado, 17 de mayo, tendrá lugar uno de los actos más destacados: una charla sobre las coplas cantadas en Huesca, ofrecida por grandes figuras de la jota. En ella, participará Nacho del Río, pentacampeón de Aragón y ganador de cinco Premios Extraordinarios del Certamen Oficial de Zaragoza, quien interpretará las coplas, mientras que el escritor e historiador José Luis Melero se encargará de contextualizar y explicar su historia. La jornada estará acompañada por la rondalla dirigida por el maestro Javier Badules.

En los meses de junio y septiembre, se celebrarán dos exposiciones: una sobre los carteles históricos del grupo y otra sobre las fotografías recopiladas a lo largo de los numerosos viajes realizados en estos cien años. Rivera ha invitado a la ciudadanía a colaborar enviando imágenes que puedan enriquecer el archivo visual del colectivo.

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Como cierre del centenario, se organizará un gran festival que reunirá a todas las personas que han formado parte de Alma Literana, con el objetivo de ofrecer una muestra representativa de su legado.

Rivera ha concluido que estos actos “han sido concebidos como un esfuerzo colectivo preparado con gran dedicación” y ha expresado su deseo de que, como ya se ha manifestado en otras intervenciones, la jota aragonesa llegue a ser declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

Como broche, ha cerrado su intervención con una copla que resume el sentir del grupo: “La jota se ha de cantar con coraje y con bravura, porque nació en Aragón y lleva sangre baturra.”

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