Carmen Bonache nació en la Puebla de Castro en 1955 y son los recuerdos de su pueblo los que mandan en su lápiz y en su pincel cuando se pone a la tarea creativa. La experiencia vital de su infancia explosiona en la paleta salpicando sus lienzos de un color intenso que produce fascinación.
La sala 4 del Centro Cultural Manuel Benito Moliner acoge una exposición de 126 obras, de las 166 que componen su legado, que ha sido inaugurada este viernes con la presencia de la autora, muy contenta de ver al público expectante en torno a sus trabajos. "Lo he hecho con todo mi corazón", ha asegurado, al tiempo que ha reconocido que llegar a este punto le ha llevado "mucha faena"".
Acompañando a la autora se encontraba su mentor, Eduardo Cajal, que le ayuda a encontrar su manera de expresarse, en el taller artístico de la Fundación Valentia. También han asistido el presidente de la entidad, Lorenzo Torrente, el director del Centro Manuel Artero, José Ángel Sierra, y el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Huesca, Ramón Lasaosa.
A Carmen Bonache le ha gustado pintar "toda la vida", expresar y compartir su realidad, y reconoce en sus obras toda su "fuerza" y su "genio". Cuando llega al taller de Eduardo, siempre tiene muy claro lo que quiere hacer, no necesita ninguna motivación extra.
José Ángel Sierra ha reconocido que, cuando entras en la sala de exposiciones, la exposición "impacta" y Lorenzo Torrente le ha dicho a Carmen que la muestra es un éxito para ella misma, porque le demuestra lo que es capaz de hacer.
Ramón Lasaosa ha celebrado que se dé visibilidad a las obras de la artista, porque si no quedarían en el ámbito de lo privado, y Fernando Vidal, compañero de Carmen, le ha dicho que se sentía muy contento por la exposición y le ha deseado que vendiera muchos cuadros.
Eduardo Cajal ha explicado que Carmen Bonache comenzó a pintar en su taller en 2019, después de comprobar que le apasionaba dibujar. "Utilizaba después lápides de colores, pero cuando ella cogía una brocha, sus obras mejoraban mucho, trascienden a través del color".
La mayoría de las pinturas de la exposición, figuración emocional, son acrílicos sobre madera, algunos sobre lienzo y cuatro piezas de bordado sobre lienzo. Hay evocaciones a circos ambulantes, iconos religiosos, personajes fantásticos y juegos de miradas, entre otras temáticas.
La exposición se puede ver hasta el 14 de mayo, de lunes a viernes de 18:00 a 21:00, sábados, domingos y festivos de 12:00 a 14:00 y de 18:00 a 21:00 .