La casa natal de Antonio y Carlos Saura ya tiene una placa que evoca sus dulces recuerdos

La viuda y la hija del cineasta han acompañado a Lorena Orduna y Ricardo Oliván en la inauguración de una placa que les ha causado "profunda emoción".

05 de Febrero de 2024
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Placa de Carlos y Antonio Saura en su casa natal en Huesca

La casa natal de los hermanos Antonio y Carlos Saura ya tiene una placa que recuerda la procedencia de los prodigiosos pintor y cineasta, respectivamente, en la calle Padre Huesca número 2, justo al lado donde actualmente abre sus puertas día a día una tienda de golosinas y dulces, lo que para Carlos fue toda una bendición, siendo como era tan goloso. Una "profunda emoción" en su viuda, Eulalia, y su hija, Anna Saura, y un motivo de orgullo para la ciudad, como ha expresado Lorena Orduna.

La alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, ha recordado el acuerdo plenario para el reconocimiento a los hermanos Saura en su calle y junto a su "hogar natal. Hemos tenido la suerte de que hayan venido su esposa y su hija. Tenemos oscenses de nombre que han llevado la voz por todas partes. Y Carlos y Antonio han sido unos de ellos. Han sido foco de cine, de pintura, de fotografía, y no queríamos dejar pasar esta oportunidad. Lo más bonito ha sido que nos hemos puesto todos de acuerdo en el pleno del Ayuntamiento. En este caso lo tuvimos todo claro".

Ha ido más allá la primer edil al afirmar que "hay que hacer un repensamiento de cómo tratamos a los oscenses ilustres en nuestra ciudad, porque a veces no somos profetas en nuestra tierra y creo que tenemos materia suficiente en Huesca para que levantemos la voz, saquemos pecho y digamos lo que tenemos y que hay que poner en valor".

Al acto, han acudido la viuda de Carlos Saura, Eulalia Ramón y su hija, Anna Saura, acompañadas por un amigo del cineasta, Luis Alegre, la corporación municipal, miembros de la Diputación Provincial de Huesca y una nutrida representación del mundo de la cultura de la capital oscense y, más concretamente, del cine.

Eulalia Ramón ha asegurado que significa "una profunda emoción. Nos acordamos mucho de la primera vez que vinimos con Carlos, Anna era pequeñita. Es como un viaje al pasado. Hace poco fue su cumpleaños, hubiera cumplido 92 y me emociona que hayamos hecho este viaje a su infancia, porque Carlos nunca dejó de ser un niño. Ha vivido muchas cosas. Fueron tiempos tristres, porque tuvo que venir después de la Guerra, pero para él y Antonio Huesca siempre ha sido muy importante. Fueron los principios de muchas cosas".

La viuda ha afirmado que a Carlos Saura "le gustaba venir aquí a ver su calle, su barrio, su casa. Le gustaba ir al parque, ver las Pajaritas de Ramón Acín. Siempre le ha gustado mucho Huesca". Ha recordado que estuvo de los 7 a los 10-11 años.

Anna Saura ha agregado que "siempre, siempre, siempre que veníamos a Huesca había que venir aquí, y ver cómo iba evolucionando Huesca. Él siempre decía que, de cuando él era pequeño y era una ciudad muy chiquitita, cuando veíamos la foto en 2021 siempre teníamos que venir. Decía que cómo iban evolucionando aquí las calles y los comercios. La última vez, cuando vio que había una dulcería se puso muy contento porque a él le encantaban los dulces. Decía: por lo menos tengo debajo un sitio donde poder comprar caramelos, chocolates... Mi tío siempre decía que él era de Huesca, luego de Aragón y ciudadano del universo. Siempre defendía Huesca a capa y espada, y decía que había nacido en Huesca, en la calle Padre Huesca. No podía ser más oscense".

Durante la jornada de este lunes, además, se presenta el libro de Carlos Saura “De imágenes también se vive. Casi unas memorias”, editado por Taurus y con la colaboración del Ayuntamiento de Huesca y el Instituto de Estudios Altoaragoneses. Anna Saura ha explicado que "las hemos titulado unas casi memorias, porque es una recopilación de textos que fue escribiendo a lo largo de toda su vida. De hecho algunos son escritos a máquina, imagínate el tiempo que tienen que durante la pandemia decidió unificar, ordenar. Tras la pandemia, empezamos a hablar con Penguin Random House para editarlos. Son textos que escribió él".

Adentrándose más en el contenido, la hija de Carlos Saura afirma que "son reflexiones, pensamientos, memorias, recuerdos, pero lo bonito es que son escritos cuando fueron. No son a posteriori, sino escritos cada uno de su momento y su época. Forman todo lo que ha sido su vida, pero de una forma muy personal, casi como una persona que forma su vida casi desde fuera. Son relatos, recuerdos, vivencias, tiene mucho de cine y de arte, de sus pensamientos, de cómo enfocaba él la vida, de cómo había evolucionado España, de la familia, de los hijos, de la guerra, de sus amigos. Un completo de cómo era él y como veía la vida".

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