"Antonio Lasheras, un hombre de campo, de retos y situaciones difíciles" es el tercer libro del agricultor, empresario, columnista y escritor que ha presentado la obra en el Hotel Sancho Abarca, al final de la asamblea de la SAT Altoaragón de almendras y frutos secos.
Flanqueado por el autor Mariano Gistaín, que le ha ayudado en la edición, y Javier García Antón, de EL DIARIO DE HUESCA, ha recordado que la base del nuevo libro son 200 epístolas de la sección de Cartas al Director de Diario del Altoaragón precisamente con García Antón de director del medio. Antonio Lasheras ha recordado que ha buscado una disciplina semanal para tratar los temas que "preocupan a la gente normal", la política, la pandemia, la guerra de Ucrania, la economía y el medio rural. "Yo siempre intento comunicar con las palabras más suaves... Todo lo que yo escribo se basa en los acontecimientos que diariamente me preocupan, por lo que deduzco que también les pueden preocupar a más gente".
Con la vocación d despertar conciencias, intenta decir "mucho con pocas palabras". Para él, "escribir es una liberación de todas las presiones que cada día llegan a nuestras vidas", y de hecho ha adelantado que prepara un cuarto libro que se titulará "La calumnia, la antesala del infierno". Dirigiéndose a Javier García Antón por sus últimas peripecias laborales, ha afirmado que "todas las personas mediocres, inútiles y sin corazón se ceban en la calumnia destructiva".
Antonio Lasheras se siente afortunado y dichoso con un bolígrafo y unas cuartillas en blanco. "Poca inversión y mucha gratificación en mi alma y mi conciencia". Ha alentado a todos a mejorar la vida. "Cuenta la historia que el pasado es un talón pagado, el futuro una letra por cobrar y sólo el hoy es dinero en efectivo". Ha reivindicado no olvidar lo pretérito, poner vitaminas a los aconteceres de hoy y pensar cómo mejorar el porvenir. "Un libro nunca nos abandonará, lo fácil será que nosotros abandonemos a los libros". Y anhela, ha concluido, que nunca lleguemos a este extremo.
MARIANO GISTAÍN
"Lo único que he hecho yo en este libro es ponerle los números, ordenarlo y sugerir la portada. Es poco pero estoy muy orgulloso. He sugerido también que salgan las hijas. Antonio es un líder nato y no basta con tener ideas o valores, sino que hay que escuchar. Esta condición se consigue porque te lo otorgan los demás, es como el reconocimiento de la verdadera autoridad", ha afirmado el escritor Mariano Gistaín, y lo demuestra en las asambleas pero también cuando se sienta en casa con un folio y un papel y un bolígrafo "gordo para escribir sus reflexiones".
"Pocos periodistas que cobramos somos capaces de mantener el ritmo de Antonio, porque él lo quiere hacer. Es un esfuerzo de voluntad en el que nunca ha fallado. Antonio no para., Hubiera sido un político sensacional, porque habla muy claro y está en las cosas de verdad, no en la retórica vana. Casi hemos tenido suerte de que no haya sido político", ha agregado Mariano Gistaín.
Ha definido el autor la gran virtud de Antonio Lasheras. "Su mayor valor es la claridad. Se entiende todo. A veces te quieres hacer el gracioso, el excéntrico, pero hay que saber reflejar lo que quieres decir. Hay veces que cuando escribo no sé lo que opino sobre un tema. Antonio se enfrenta al tema de frente y tiene una claridad que no hay más que ver sus títulos, en que se entiende todo".
Mariano Gistaín ha puesto de manifiesto la habilidad para percibir la actualidad incluso más allá que los periódicos. "Da igual que sean temas puntuales, porque al leerle se entiende perfectamente dos años después. Se basa mucho en la sabiduría antigua, la de sus padres, sus abuelos, que muchas veces se expresa en refranes", y ha expuesto las dificultades que percibe el propio Gistaín en sus clases de Escritura Creativa que imparte para hacer entender la solidez que aportan los aforismos.
Javier García Antón ha iniciado su intervención asegurando que, "para un director de periódico, recibir una carta de un lector es un pequeño triunfo. Cuando alguien decide aplicarse semanalmente, ya ha trascendido la condición. Ya no es sólo un lector, sino que ha firmado un invisible e intangible pero real contrato de corresponsabilidad. El director que no lo conciba así es un simple llenapáginas, y les aseguro que hay muchos llenapáginas".
Ha definido a Antonio Lasheras como "un ciudadano con valores, un empresario vocacional y un escritor comprometido. Se precisa muchísimo compromiso para pararse en medio de la noche a hacer balance de la jornada, a abstraer las lecciones de la vida y a reflejarlos en una cuartilla con esa bonita letra".
"Antonio toma inspiración de la mirada externa. Pero también de esa metafísica pulsión que emana de las personas a las que quiere. De su esposa, de sus hijas, de sus vecinos, de sus compañeros del mundo asociativo. Y otra más que trasciende, que es la que proviene de su fe en el Altísimo. Es en sí mismo una Torre de Babel de distintos lenguajes virtuosamente armonizados y trasladados, en este caso, a las Cartas", ha agregado el periodista.
El momento más jubiloso de la presentación ha sido cuando el periodista de EL DIARIO DE HUESCA le ha entregado una tarjeta. "Pero he de confesar la verdadera intención de mi presencia en este alumbramiento literario. Antonio, te voy a ofrecer que, a partir de ya, con un plazo de una semana como máximo, pases a integrar la nómina de colaboradores de EL DIARIO DE HUESCA. Esto no es transfuguismo sino evolución natural. Y tú sabes mucho de eso. Así que convierte esta tarjeta en un contrato. No es preciso que abandones el otro medio. Somos más rápidos y lo pondremos antes. Además, nuestras tribunas van con foto y tú das muy bien ante la cámara. ¡Hala! El lazo ya ha sido echado. Espero pescar en tu generosidad, seremos dos panes para al menos cinco peces. Palabra de director en la petición de palabra del preclaro lector".