El Centro de Congresos de Barbastro alberga desde este sábado la exposición ‘Luis Alberto de Cuenca. Poesía de cine’, que rinde homenaje al autor y a su obra poética a través de un original diálogo con el séptimo arte.
La muestra, organizada en el marco del Festival Barbitania, podrá visitarse hasta el próximo 15 de junio. La propuesta combina algunos de los poemas más emblemáticos de Luis Alberto de Cuenca con carteles de cine y cómic que los acompañan, en una fusión artística única.

En total, reúne 23 carteles de cine, dos de cómic, así como diversos fotocromos, folletos y materiales que evocan la obra literaria del poeta. “Hemos unido los dos artes, como si la palabra fuera el alma de la exposición, completada con los carteles que son el cuerpo de la misma, dando prioridad a los poemas que Luis Alberto considera fundamentales en su obra”, ha explicado el comisario de la exposición, David García, quien también comisarió en ediciones anteriores del festival una retrospectiva sobre José Luis Garci.
Luis Alberto de Cuenca ha expresado su emoción: “Esta exposición significa mucho para mí por estar incluida en el Festival Barbitania, y porque supone una de las actividades que más va a perdurar en el tiempo en el marco del festival. Son dos artes que me gustan mucho, la poesía y el cine, y en esta exposición los tengo juntos”.
La concejal de Cultura del Ayuntamiento de Barbastro, Pilar Abad, ha destacado el valor de esta muestra: “Recoge parte de la obra poética de Luis Alberto de Cuenca, está centrada en sus poemas y el cine, relaciona las distintas disciplinas que hay a lo largo de la obra de Luis Alberto de Cuenca. En esta ocasión nos centramos en la parte cinéfila”.
En la inauguración ha estado presente también el escritor Juan Manuel de Prada, quien ha elogiado la capacidad de Luis Alberto de Cuenca para “elevar a categoría poética las expresiones artísticas populares como el cine o el cómic, llevándolas desde Homero hasta nuestros días con humor, dolor y una admirable capacidad para mostrar los fantasmas del alma”.

Los poemas recogidos en la exposición están dedicados al cine universal, reflejo de la vasta cultura cinematográfica del autor, que abarca géneros tan diversos como el western, el cine negro, la ciencia ficción, la fantasía o el melodrama. “Hemos buscado los carteles más especiales que pudieran acompañar el arte de sus palabras”, ha subrayado David García.
CONTEXTOS
Carlos Zanón, como director de BCNegra, adapta sus criterios de lectura según el contexto: si es personal, sigue sus gustos; si es para el festival, piensa en el público, combinando propuestas editoriales con nuevas voces o autores poco conocidos.
Irene Vallejo, desde la perspectiva del público lector, destaca la influencia de libreros independientes y reivindica su importancia frente a las grandes cadenas. Arsenio Escolar elige libros desde diferentes roles (lector, editor, periodista), y se guía por bibliotecas, amigos y profesionales del sector cultural. Antón Castro, editor de Artes y Letras, subraya que a veces hay que recomendar o publicar libros que no le gustan, pero que hay que pensar en el lector, en sus gustos, y que él intenta sorprender al lector.

En la mesa, moderada por Berna González Harbour, también se ha debatido la polémica en torno al libro El Odio, de Luisgé Martín. Carlos Zanón ha defendido la libertad creativa del escritor, aunque ha considerado que el autor debería haber informado a la madre de las víctimas antes de publicar. Arsenio Escolar ha coincidido, señalando que faltó esa llamada previa, aunque cree que, de haberla hecho, el autor no hubiese escrito el libro. Irene Vallejo ha criticado el enfoque unilateral de la obra y ha destacado la ausencia de voces diversas, especialmente la de la madre, en contraste con autores como Capote o Carrère, que se documentaron ampliamente. Antón Castro ha recordado que Luisgé Martín suele escribir desde lo personal y ha planteado que, si se limitara la escritura por cuestiones morales, muchos libros no se habrían escrito.
LUZ GABÁS
En la sección Conversatorio, Luz Gabás ha conversado con Mariano Gistaín y Antón Castro sobre su trayectoria. Gabás ha hablado de cómo su padre fue la inspiración detrás de Palmeras en la nieve. Respecto al componente emocional en sus obras, ha explicado que, en tiempos donde predominan el trauma y la literatura del yo, sintió la necesidad de tomar distancia de su novela, que inicialmente escribió en primera persona. Ha señalado que sus novelas son corales y que en cada personaje hay algo de verdad, sirviéndose de ellos para abordar los temas que le interesan, desde su propio contexto.
La última mesa de la mañana se ha dedicado a la literatura del centro y este de Europa. Mercedes Monmany, una de las críticas literarias más importantes, ha lamentado que la guerra en Ucrania haya sido el detonante para descubrir autores como Kurkov o Zhadan. Ha recordado sus primeros contactos con esa literatura gracias a las traducciones de Sergio Pitol y editoriales como Salamandra, que tradujo a Sandor Marai Ha defendido la literatura como vía para explorar vidas y matices que la no ficción no alcanza.
Arsenio Escolar ha resaltado el papel de Emilia Pardo Bazán en la difusión de los clásicos rusos en España, y ha destacado su papel como gran gestora cultural. También ha mencionado cómo esa influencia permitió que Galdós fuera traducido al ruso. Ioana Gruia se ha definido como autora mediterránea con imaginario rumano escrito en español. Ha reflexionado sobre escribir la infancia en otra lengua y sobre la mezcla de identidades. Y vinculado viaje y literatura como formas de exploración, Gruia y Escolar han citado autores como Galdós, Pamuk, Lampedusa, Cortázar o Durrell como ejemplos de viaje y literatura.
La tarde ha continuado en el salón de actos de la UNED, con la sección Plataforma de despegue, moderada por Antonio Lucas. Se ha debatido sobre nuevas propuestas literarias y formas híbridas de creación. Noemí Sabugal ha hablado de sus libros como cruces entre crónica, ensayo, viaje y memoria, con las voces ajenas como eje.
Lola Nieto ha defendido el impacto emocional como criterio lector, y ha reivindicado influencias más allá de los libros, como el cine, la música o el manga. Ha mencionado su interés por autoras como Satoko Ichihara frente a figuras canónicas como Mishima. No porque no sea de su interés, sino porque no es el momento. J
Javier Pérez Albéniz ha compartido su experiencia como autor del tebeo El designio, ilustrado por Laura Pérez Vernetti, y ha anunciado un nuevo proyecto en la misma línea. La conversación ha destacado la hibridación de géneros y la apertura a nuevas formas de contar. Antonio Lucas ha cerrado la mesa con una sentencia: “Si el escritor es un pringado, el poeta es un loser”.
En la última mesa del día, Mercedes Monmany, Benjamín Prado y Sergio del Molino han debatido sobre la transversalidad de géneros literarios, moderados por Marta Sanz. Benjamín Prado ha señalado que cada disciplina tiene sus propios códigos y que para cruzar géneros hay que conocerlos bien. Sergio del Molino ha explicado que, al escribir, usamos todos nuestros recursos y conocimientos de géneros, porque forman parte de nosotros. La mayor disciplina de su obra es la música, pero se considera un pésimo cantante. Tal vez por ello sus obras chorrean música y no pueda expresarla de otra manera que no sea a través del papel. Mercedes Monmany ha puesto como ejemplo a la escritora Anne Carson, como artista multidisciplinar, por su combinación de poesía, ensayo y narrativa. Ha remarcado que vivimos rodeados de estímulos que propician la hibridación de géneros. La mesa ha defendido la libertad formal como elemento clave de la creación contemporánea.