La voz delicada y poderosa de Natalia Lafourcade ha vuelto a conquistar el anfiteatro natural de Lanuza este sábado en una de las noches más especiales del Festival Internacional Pirineos Sur. Doce años después de su primera actuación en este emblemático escenario, la cantautora mexicana ha ofrecido un recital inolvidable que ha fusionado folclore, bolero, pop y activismo cultural, reafirmando su condición de referente de la música latina contemporánea. Todo ello en un concierto marcado por una lluvia fina que no ha impedido que cantante y público se entregarán en una noche tan especial.
Uno de los momentos más emotivos de la velada ha llegado con la entrega del Premio Pirineos Sur a la Diversidad Cultural 2025, que la artista ha recibido en el propio escenario de manos del diputado de Cultura de la Diputación Provincial de Huesca, Carlos Sampériz. El público ha acompañado con una ovación cerrada este reconocimiento que celebra no solo el talento musical de Lafourcade, sino también su compromiso con la cultura de raíz y los derechos humanos.
Embajadora de la Música por la Paz, ganadora de múltiples Premios Grammy y fundadora del proyecto comunitario Un Canto por México, Lafourcade ha reivindicado siempre la diversidad como una fuente de inspiración artística.
La distinción, que este año comparte con Julieta Venegas, forma parte de la apuesta de la Diputación de Huesca por visibilizar el poder transformador de la música en una edición del festival que está marcada por la presencia femenina y la diversidad cultural. Con este homenaje, Pirineos Sur ha consolidado su vocación como puente entre culturas y escenario para artistas que hacen de la música un vehículo de cambio.