La plaza Mayor de Madrid volvió a llenarse de folclore, emoción y tradición con motivo del homenaje a san Isidro, patrón de la capital, en el marco de la 72ª muestra de folclore de las casas regionales. Este evento es ya una cita imprescindible del calendario cultural madrileño, donde se dan cita grupos de música y danza tradicional pertenecientes a las casas regionales de Madrid capital. Aragón, Asturias, Cataluña, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Galicia, Extremadura y País Vasco estuvieron representadas a través del colorido de sus trajes y el sonido de sus raíces.
Uno de los momentos más especiales de la jornada, celebrada el 10 de mayo, fue la intervención de la casa de Aragón en Madrid, que conmemoraba su 95 aniversario. Para celebrarlo, ofrecieron el espectáculo Rondando Madrid, una creación inédita que a través de la jota aragonesa homenajeó a la ciudad y a su patrimonio histórico-artístico. Esta propuesta artística transformó la plaza Mayor en un escenario que unió la tradición aragonesa con los símbolos más queridos de la capital.
El espectáculo, creado y dirigido por Toño Julve, con coreografía y dirección de baile de Susana Raya y dirección de rondalla a cargo de Rafa Blázquez, se inspira en la ronda tradicional aragonesa. A través de coplas joteras, Rondando Madrid ofreció un recorrido por algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad, desde la puerta de Alcalá hasta la sede de la casa de Aragón en la plaza de la República Argentina.
El paseo propuesto por Julve comienza en la puerta de Alcalá, y continúa por la puerta del Sol, la plaza Mayor, el palacio Real, el templo de Debod, la Gran Vía, la plaza de Cibeles, el museo del Prado, el parque del Retiro y finaliza en la casa de Aragón. Cada espacio fue evocado con versos, danza y emoción, integrando lo madrileño con el alma aragonesa en un formato escénico breve pero profundamente simbólico.
Toño Julve, que no pudo estar presente por otros compromisos, explica que fue su alumnado quien representó el espectáculo en la plaza, que estaba abarrotada. “Fue un tremendo éxito, gustó muchísimo la idea y el concepto, y el público aplaudió un montón”, relata. Julve subrayó que el montaje fue defendido con entusiasmo por una cantera de jóvenes joteros, muchos de ellos descendientes de aragoneses, y otros simplemente atraídos por el arte de este género musical.
La escuela de jota en Madrid, impulsada por Julve y Raya, se ha convertido en un semillero cultural que cada año prepara nuevas piezas para mostrar tanto en la capital como en encuentros nacionales. Montajes como este permiten no solo mantener viva la tradición, sino también acercarla a nuevos públicos urbanos.
Esta idea de crear espectáculos temáticos comenzó hace años con una propuesta para Huesca, pero tuvo que interrumpirse por otros proyectos. Ahora, Julve trabaja en un proyecto basado en la copla, que pueda convertirse en una herramienta para promover el turismo y la identidad cultural oscense.
A lo largo de los últimos años, Julve y Raya han ido estrenando un montaje diferente cada temporada, siempre en torno a la jota aragonesa como base narrativa. En 2021 presentaron Sabor andorrano, en 2022 Beso al Pilar, en 2023 Azorín, la jota de Madrid al mundo, en 2024 Tus pueblos nunca abandones y ahora en 2025, Rondando Madrid.