La LIII edición del Campeonato Nacional de Vuelo sin Motor, organizado por el Aeroclub Nimbus y Fly-Pyr Santa Cilia, regresa un año más al aeródromo de Santa Cilia. Se trata de una prueba que se realiza por encargo de la Real Federación Aeronáutica Española.
Un total de 25 pilotos nacionales además de tres nacionalidades (argentina, polaca y francesa) figuran en el campeonato. La celebración de este tipo de pruebas implica, según la organización, unas 400 operaciones y no menos de 1.000 horas de vuelo. Además, desplaza a alrededor de cien personas entre competidores, acompañantes y organización.
En sus 45 años de existencia, este es el octavo campeonato que organiza el Aeroclub Nimbus. La mayoría de ellas en el antiguo aeródromo de Monflorite y desde que su reconversión en el actual aeropuerto Huesca-Pirineos lo hizo imposible tras la edición del año 2006, en el aeródromo de Santa Cilia.
Las jornadas irán paso a paso. En primer lugar se realiza una reunión matinal en la que la organización presenta la tarea a ejecutar. Este miércoles, por ejemplo, consiste en despegar desde el aeródromo de Santa Cilia, volar hasta el valle de Sort en la parte más oriental de la provincia de Lleida, el embalse de la Peña, Biescas, Jaca y Santa Cilia. Un total de 330 km que son cubiertos en vuelos de aproximadamente tres horas de duración.
Los pilotos serán remolcados por los cuatro aviones que colaboran en esta edición. A partir de ahí, la organización abirá la puerta de salida y los pilotos serán libres de cruzarla cuando consideren y se les puntuará tanto la distancia recorrida como la correspondiente corrección en función del tipo de planeador.