Huesca La Magia A ha hecho una faena redonda en Benalmádena para entrar de lleno quien la lucha por el ascenso directo a División de Honor. Lo tiene en su mano. Y puede ser en Huesca el próximo 5 de abril con sus encuentros ante Ibiza y sobre todo frente a Granollers. El enfrentamiento con los vallesanos se presenta como si fuera “la madre de todas las batallas” porque son los dos equipos que pugnan por el mismo objetivo. Y será en la cancha oscense, donde se va a respirar un ambiente espectacular.
Tras esta jornada, Astures es líder y virtual campeón (27 puntos), Huesca La Magia y Granollers llevan 18 (pendientes los oscenses de la reclamación con el Almería, que en circunstancias normales debe reportarles la victoria), y tras ellos Huelva, Oviedo B e Ibiza (15).
No podía empezar mejor el fin de semana para el Huesca La Magia en Benalmádena. Los oscenses se deshacían por un contundente 7-0 al Universidad de Valladolid. El pleno de victorias lo firmaron Natxo Cervelló-Celia Ibáñez en dobles mixtos (un triple 8-11); Juliana Giraldo-Nikté Sotomayor en dobles femenino (10-11, 7-11 y 6-11); Alejandro Gállego-Gonzalo Isábal en dobles masculino (11-8, 6-11, 10-11 y 6-11); y los individuales de Nikté Sotomayor (2-11, 7-11 y 5-11), Natxo Cervelló (6-11, 8-11, 11-8, 9-11), Juliana Giraldo (4-11, 11-9, 6-11 y 6-11) y Alejandro Gállego en un partido que se le puso cuesta arriba ya que empezó perdiendo (11-8, 11-7) y tuvo una formidable reacción para remontar (7-11, 2-11 y 10-11).
En el segundo encuentro, Huesca La Magia se impuso al conjunto gallego del Athlos por 5-2. Encarriló la victoria el equipo oscense con las victorias en dobles mixtos de Natxo Cervelló-Celia Ibáñez en cinco sets (11-9, 10-11, 9-11, 11-4 y 10-11) y en el dobles femenino de Juliana Giraldo-Nikté Sotomayor (8-11, 11-8, 5-11 y 9-11). Acortó distancias el dobles masculinos del Athlos al ganar a la pareja oscense Alejandro Gállego-Gonzalo Isábal (11-10, 8-11, 9-11, 11-6 y 11-6). Juliana Giraldo (10-11, 5-11 y 7-11) y Alejandro Gállego (11-8, 3-11, 4-11 y 5-11) ganaron sus individuales -con lo cual ya estaban en el bote los tres puntos de la victoria del partido-, perdió el suyo Nikté Sotomayor (11-7, 11-9, 9-11 y 11-5) y cerró el choque la victoria de Natxo Cervelló (11-8, 8-11, 8-11 y 8-11).
Y la puntilla la ha dado Huesca La Magia este domingo al endosarle otro 7-0 al equipo anfitrión, Benalmádena. Este nuevo pleno de victorias lo han firmado Natxo Cervelló-Celia Ibáñez en dobles mixtos (9-11, 11-10, 11-4 y 11-9); Juliana Giraldo-Nikté Sotomayor en el dobles femenino (11-3, 11-7 y 11-7); el dobles masculino Alejandro Gállego-Gonzalo Isábal (11-7, 11-6 y 11-9); y los individuales Juliana Giraldo (11-6, 11-7 y 11-5), Alejandro Gállego (11-9, 11-9, 11-3), Nikté Sotomayor (11-5, 11-3 y 11-9) y Natxo Cervelló (11-5, 9-11, 11-8 y 11-4).
Como se puede apreciar, tan solo se han cedido dos puntos pero en partidos tan intensos como luchados, lo cual habla bien a las claras del excelente comportamiento del equipo. Y eso es lo que destacaba el entrenador, Roberto Mollinedo. “Ha sido un fin de semana muy bueno, con un excelente trabajo en equipo, mucha motivación, mucha energía y también se ha notado la calidad de los entrenamientos de las últimas semanas”.
El responsable del equipo oscense ha subrayado que “el funcionamiento como equipo ha hecho que se haya competido muy bien. Y se nota igualmente el crecimiento de los jugadores del club con un nivel muy elevado que se refleja táctica, técnica y físicamente y también en la confianza que han demostrado tener en partidos de tanta tensión”.
Además de ese “subidón” de la pareja oscense Gállego-Isábal, también se refería al cambio de Juliana Giraldo desde el punto de vista técnico con el trabajo que está realizando en Huesca, a la confianza y alegría que ha aportado Nitké -que no podrá estar en la última jornada-, a la labor de Natxo Cervelló y Celia Ibáñez… “Se ha redondeado un equipo muy competitivo, con ganas y aspiraciones máximas”, ha rubricado Mollinedo, que considera “un gran éxito” terminar en el podio de la categoría y ya no digamos si se asciende a División de Honor, todo un hito para reencontrarse con una categoría que también forma parte de la historia del Bádminton Huesca.