Más de un centenar de deportistas, entre atletas y entrenadores, han participado este fin de semana en una concentración organizada por el CAM-Hinaco en Monzón con sus clubes filiales a fin de realizar unas jornadas técnicas y prácticas, así como de convivencia, ante los objetivos que marca la entidad para la temporada al aire libre y donde cobra prioridad el reto del ascenso a Primera División.
Son ocho los clubes filiales con que cuenta el CAM-Hinaco y todos han asistido a la capital mediocinqueña: CA Fraga-Bajo Cinca, Utebo, Atletismo Pómez Barbastro, CA Binéfar, Zenit, Tragamillas Alcañiz, Ejea y Zuera.
El director técnico del CAM-Hinaco, Diego Altemir, fue quien dio la bienvenida en esta primera toma de contacto conjunta en la que por vez primera entraban los nuevos atletas de categoría absoluta. “Además de la convivencia y de la piña que se busca, y que se ha conseguido, se ha tratado de hacer un aprendizaje. Eso ha sido lo fundamental. Nuestros entrenadores han aportado muchas cosas nuevas, han incidido en detalles y aspectos para pulir y corregir defectos y, sobre todo, en ofrecer una perspectiva diferente en cuanto al trabajo que los atletas hacen en sus clubes y con sus respectivos entrenadores. Son nuevas nociones, una aportación que pensamos ha sido positiva para todos”.
La matinal del sábado fue “más cañera”, relata Altemir, que explica el desarrollo del trabajo realizado. Sesiones lácticas para los especialistas de 400 y 800 con Ricardo de la Fuente, un fartlek para los fondistas preparado por Phondy y dirigido por Eliseo Martín, técnica y corrección de los lanzamientos con Jimmy Villacampa y Alberto Navalón, trabajo de salidas y explosividad en los velocistas con Richy Verdugo y Juan Montaner, pértiga y altura con Javier Gazol y Dani Martí.
Todo ello condujo a una espectacular y suculenta paellada elaborada por Cristian Busqueta en el centro de la pista y en medio de un gran ambiente.
Tras el descanso y paseo por Monzón en la tarde del sábado, los atletas foráneos descansaron en la Residencia de Deportistas.
Y el domingo, vuelta al trabajo. Una labor muy enfocada a los relevos bajo la batuta de Richy Verdugo con todo tipo de detalles, consejos, salidas, llegadas, entrega de postas… un curso práctico de algo tan complejo como son estas pruebas que muchas veces se escapan sin darse uno cuenta. En ello, y para el relevo largo (4x400) ha incidido Paco Dorado en sus explicaciones.
Mientras, Eliseo Martín ha dado una “master class” a otro de los grupos de fonderos con los obstáculos y la técnica que se requiere. Detalles para saber encarar y gestionar una prueba tan dura que van desde la llegada a la valla, cómo afrontar el paso y el salto de la ría. Nadie mejor que él, que lo ha sido todo en esta disciplina, para trabajarlo y trasladar su experiencia. Los fonderos también han realizado un entrenamiento de 12 kilómetros.
El CAM-Hinaco ha cuidado con mimo esta concentración, en la que los atletas han tenido a su disposición un abundante avituallamiento a base de fruta, agua, bebidas isotónicas y barritas energéticas.
“Se han superado con creces todas las expectativas. La iniciativa ha tenido mucha aceptación entre los clubes filiales. Saben que estamos a su disposición y que ellos son parte de Monzón también. Estamos muy contentos y hemos conseguido que todos salgan motivados. Por estar en Segunda División no deja de ser una piña. No hay que bajar los brazos. El objetivo es volver a Primera División y para ello, de entrada, tenemos que lograr situarnos entre los ocho mejores en el estadillo que hay que presentar antes del 8 de mayo”, ha concluido Diego Altemir.