La SD Huesca sigue inmersa en su campaña de abonados de cara a la temporada 2023/24. La "Identidad Altoaragonesa" es el lema pensado para este año por parte del departamento de Ticketing y Marketing del club altoaragonés que se dio a conocer el pasado 27 de junio de forma oficial. Con todo ello sobre la mesa, el ritmo de renovaciones no es malo pero lo cierto es que está siendo algo inferior al que se vivió hace justo un año, cuando el Huesca afrontaba su segundo año consecutivo en la liga de plata del fútbol español.
Esta misma semana del 11 al 16 de julio es la última para renovar el abono. Los aficionados pueden ampliar su estancia en El Alcoraz a través de la página web abonados.sdhuesca.es o de forma presencial en la oficina de ticketing (Coso Bajo 13-15).
Hay varios hinchas que tienen muy claro ya desde que terminara la última temporada que no iban a renovar su carnet de abonado. "El precio del abono y la poca confianza que me transmite el equipo y el club" son motivos para que Andrés no siga como abonado.
Aquí también tiene que ver el ligero incremento de precio que se ha producido respecto a la temporada pasada. Porque aunque el club anunciara que se mantenían los precios, hay que tener en cuenta que en la campaña para el curso 2022/23 se aplicó un descuento del 10% por los partidos no disfrutados por la pandemia, cuando todavía había restricciones de aforo en los estadios de fútbol españoles.
El próximo día 18 de julio se abrirá un período de incidencias y reubicaciones que se prolongará hasta el día 21. Las nuevas altas se podrán realizar desde el 24 de julio al 8 de agosto.
Hay quien ha decidido renovar pero reubicándose porque "el precio de Tribuna General es muy alto, entonces nos cambiamos a Tribuna Gol Norte que es más barato". En cualquier caso, la "ilusión sigue allí a pesar de las discrepancias que podamos tener con la directiva. Además, el juego del equipo tampoco acompaña", asevera Pablo.
David añade que "pese a la mala actitud del club respecto a los precios de los abonos y las renovaciones, nos mantenemos fieles pero sin pagar el alto precio de otros sitios".
Otro de esos fieles es Pablo C., que va a El Alcoraz desde hace mucho tiempo con su padre “y me gusta acompañarle”. Confiesa que “siempre me ha gustado ver el fútbol en directo, bastante más que por la televisión. Al Huesca lo voy a seguir viendo y es un buen plan para cuando estamos por Huesca que tampoco hay una gran oferta de entretenimiento y ocio. Pero vamos, otros años renovaba por ilusión, este año de eso vamos justos”.
La provincia seguirá estando con su equipo, pero algunos se “ahorrarán” la carretera
Donde se va a notar un bajón importante y no tanto en la propia ciudad será en las localidades de la provincia, “sobre todo por el juego desplegado por el equipo”. Muchos de estos aficionados han hecho el esfuerzo en las últimas temporadas de desplazarse hasta Huesca cada dos semanas desde sus respectivas poblaciones para ver a su equipo, pero ahora prefieren seguirlo por televisión para ahorrarse el trayecto. Es el caso de Juan, a quien no le motiva el juego del equipo y por eso prefiere no viajar desde Graus como ha venido haciendo en las últimas temporadas.
Caso diferente es el de Pablo y su hijo, ambos vecinos de Barbastro. Explica que aunque ha renovado, “lo he hecho con dudas… El club es cuando más necesita el apoyo del aficionado, no os dejaremos solos”.
Carlos de Blas, miembro de la Peña Frente Serrablés, asegura que “se han oído muchas protestas y amenazas de gente que no iba a renovar, pero por el momento todos los que conozco han renovado”. Es cierto que durante estas semanas ha escuchado el comentario de algunos aficionados diciendo que no iban a ampliar su vinculación con el club, pero “creo que se ha cambiado por el de ‘he renovado pero será otra temporada igual, y ya si que es la última que vengo’”.
Respecto a la peña, subraya que la pasada campaña disponían de cinco abonos a nombre del Frente Serrablés y este año han decidido quedarse solamente con tres por miedo a pagarlos y que luego la gente no los quiera. “El año pasado ya nos costó”.
Diego, de Calatayud, se hizo socio junto a su padre y su hermano tras la primera etapa del club en Primera División. Ahora estudia en Zaragoza y siempre ha sido del Huesca porque su padre tiene raíces en Castejón de Sos. “Este año vamos a renovar pero por cariño al club, pero ellos no se lo han ganado. Ni el equipo ni el entrenador…”
Este aficionado explica que para los aficionados que residen en Huesca ciudad “no supone ningún esfuerzo ir al campo, más allá del propio dinero. Pero en nuestro caso, viniendo desde Calatayud y haciendo una hora y media de ida y otra hora y media de vuelta… Si por lo menos los ves que peleas, aunque luego pierdas o empates, pero visto lo visto esta pasada temporada que salíamos a jugar a no perder, a empatar a cero jugando con defensa de cinco, pues se te quitan las ganas”.
En definitiva, las renovaciones avanzan a un ritmo considerable, pero con un sentir completamente diferente a la ilusión que se impregnó en la afición hace justo un año en mitad de un nuevo proyecto tras la salida de Xisco Muñoz y la llega de Cuco Ziganda. El club informará en los próximos días de la cifra oficial de abonados.