Ezequiel Ávila, el Chimy, disfruta estos días de su casa, Huesca, y esta tarde de viernes ha compartido una charla con el nuevo -y viejo- presidente de la Sociedad Deportiva Huesca, Agustín Lasaosa, de cuyo retorno se ha alegrado con la sinceridad que caracteriza al argentino hoy en las filas del Real Betis Balompié.
"Lo que diga el presi", contesta ante el deseo expresado e irrealizable -a fecha de hoy- de vestir la elástica azulgrana, demostrando un afecto sincero por Lasaosa. La escena se produce en la terraza del hotel Abba Huesca.
Una conversación breve y fluida en la que el argentino desea lo mejor para la Sociedad Deportiva Huesca y para el recién estrenado presidente, que en las primeras horas ha recibido un aluvión de felicitaciones y, como es propio de una parte de la condición humana, algunos silencios. Aunque, vista la efusividad del Chimy, nada más importa que el comienzo de una nueva etapa que enlace con aquella en la que la efervescencia demostraba que lo mejor está por venir. Quizás la presencia de nuestro rosarino del alma y sus amables palabras sean la mejor señal para el Huesca. Con ambos, todo fue más fácil y mejor. Ese "para lo que quieras, presi", suena bonito. Quien sabe si en un futuro no lejano...
Por cierto, Ávila confirma que, a fecha de hoy, es jugador del Real Betis Balompié con toda la perspectiva de continuidad, que está encantado de vivir en Sevilla y que ninguno de los culebrones de verano que le buscan otros colores tiene sentido. Aunque en el fútbol nunca se puede decir nunca jamás.