Dos generaciones distintas, la de Pruden Induráin Larraya y la de los jóvenes hermanos Jaime y Pablo Castrillo Zapater, han protagonizado un debate fluido, distendido, relajante y pletórico de anécdotas bajo la acertada conducción de Javier Gómez Ramos, de Zaragoza, en el salón de actos de la Diputación Provincial y dentro de los actos organizados por la Comisión de Fiestas del Barrio de Santo Domingo y San Martín y por Ciclos Cored. El título bajo el que se han situado en el escenario, "Jóvenes talentos ciclistas: actuación, proyección y futuro".
Los oradores han estrenado el acto explicando sus motivaciones y desarrollo de sus carreras. La de Prudencio Induráin, a la sombra de la figura de su hermano Miguel, aunque con su criterio propio. Con una gracia tranquila que ha desatado las risas en el auditorio, ha explicado que tuvo sus momentos de relumbrón en Suiza, en Portugal y también en el Tour de Francia. "Hacía mi trabajo y, cuanto más atrás quedaba luego, mejor", aunque ha hecho muy buenos puestos. Ha relatado sus disputas con Chiapucci o Gianni Bugno, momentos relevantes y también una carrera en la que ha sido consciente de cuál era su papel en todo momento. Jaime Castrillo ha explicado la razón para bajarse profesionalmente de la bicicleta: "No me sentía corredor profesional". Lisa y llanamente. "Conócete a ti mismo". El benjamín, que se estrena en el pelotón de élite con el Kern Pharma, pleno de ilusión, ha revelado sus impresiones de un deporte en el que sus practicantes buscan unos perfiles completos, con los que no destacan específicamente en ninguna especialidad pero tampoco flaquean.
De hecho, bajo la dirección de Javier Gómez, han aludido a las diferencias entre el automatizado ciclismo de hoy y el de "las sensaciones" de antes al que ha aludido Pruden Induráin. Aunque todo está planificado, como ha reconocido Pablo Castrillo, también hay un margen para romper las rutinas. En treinta años, todo está sometido a parámetros y a Inteligencia Artificial, mientras antes se jugaba con cara de póker a la natural. Un mismo deporte, dos manifestaciones. Es la evolución.