Ficha técnica:
Bada Huesca: Gabor Decsi, Ben Tekaya; Daniel Pérez 4, Yoel Cuni 2, Rafael Paulo 4, Fabricio, Ian Moya 1, Ignacio Suárez 1, Carlos Pérez, Tchitombi 1, Artur Parera 6, Nenadic 4, Edu Álvarez, Frank Cordiés 5 y Samuel Cordiés 5.
Fraikin BM. Granollers: Pau Panitti, Krivokapic; Deumal 6, Espigulé 1, Freitas 1, Marcos Fis 6, Figueras 7, Reguart 3, Armengol, Gerard Domingo, Fischer 1, Sergi Franco 8, Ferrer 1, Chaves 3, Palomino 2 y Urdangarín 2.
Parciales: 5-4, 7-5, 7-9, 11-13, 12-15, 15-19 al descanso. 21-20, 24-26, 25-28, 29-31, 31-36, 33-41.
Árbitros: José Antonio Huertas Herrador - Antonio Javier García Del Salto. Excluyen a Ian Moya (25') por los locales; y a Deumal (49') y Palomino (4') por los visitantes.
Incidencias: Antes del partido se ha guardado un minuto de silencio en memoria de Javier García Cuesta, exjugador y seleccionador de la Real Federación Española de Balonmano. Acudieron al Palacio 1.520 espectadores.
Derrota de un competitivo Bada Huesca ante un Granollers que, a día de hoy, es un bloque demasiado compacto como para meterle mano. Buen inicio de cada parte de los oscenses, que lideraron el marcador en los primeros minutos de la primera parte. Pero los catalanes lograron darle la vuelta a base de calidad para irse por delante al descanso. Pese a ello, Huesca no le perdía la cara al partido y en apenas cuatro minutos, en un buen arranque del segundo periodo con un parcial de 6-1, empataba el partido. Era tan sólo un espejismo ante la efectividad de Granollers en ataque y la fragilidad de los locales en defensa. Todo se juntaba.
Buen partido de Rafa Paulo en la anotación y otra destacada actuación de Daniel Pérez -con un 80% de acierto en el lanzamiento-, que parece que lleve toda la vida jugando en el Palacio. Buena tarde también para Gabor Decsi, aunque insuficiente ante la calidad visitante. Polémica actuación arbitral, que desquiciaba al Palacio por momentos.
Partido parejo de inicio, con una buena parada de Gabor Decsi, que también tenía tiempo de aliarse con el travesaño en la siguiente jugada de ataque de Granollers. Los catalanes no empezaban bien y cometían varias pérdidas que propiciaban la igualdad en el luminoso. Dos minutos para Palomino y Huesca que lograba ponerse con una diferencia de dos goles tras una pérdida de Figueras.
Sergi Franco ponía a su equipo por delante por primera vez (7-8) tras ejecutar un siete metros. La buena noticia para Bada es que Gabor Decsi seguía muy entonado. Rafael Paulo deleitaba al Palacio con dos lanzamientos de mucha clase: primero con un siete metros por encima del portero y después con una rosca perfecta para desquiciar a Pau Panitti.
El partido cumplía el minuto 20 y seguía muy parejo. Aparecía Yoel Cuní en pista para dar empaque al equipo en ambas áreas, pero Granollers lograba una ventaja de tres goles (11-14). No acababa de estar cómodo el equipo de Nolasco, que tenía que encontrar una vía de escape ante la experiencia visitante. Artur Perera aparecía para hacer dos goles consecutivos, pero se encontraba con la respuesta de Marcos Fis, muy efectivo desde la derecha. El descanso llegaba con 15-19 en el marcador.
Buen inicio de Bada Huesca en la segunda mitad, que lograba empatar el partido (20-20) en los primeros cuatro minutos. Dani Pérez era un balón de oxígeno para los de Nolasco, que lograba meterse de lleno en el partido aunque sabían que no podían descentrarse porque el rival te podía matar en cualquier momento.
Urdangarín, desde la derecha, castigaba a Gabor y Frank Cordiés se encontraba con la robusta defensa visitante. Figueras hacía daño actuando de pivote y encontrando lanzamiento liberado. Se ha dado un momento de ida y vuelta en el que Huesca no vive demasiado cómodo. Nenadic marraba un siete metros, pero Cuni daba esperanzas a los rojos.
Con 29-30 Huesca perdía un balón en ataque y concedía un siete metros protestado por el Palacio. Salía Ben Tekaya y cerca estaba de detener el lanzamiento poco antes de que el Palacio perdiera los nervios con las controvertidas decisiones arbitrales en el área de Huesca. Las imprecisiones aparecían también en ataque, con pérdidas incompatibles con la victoria.
La realidad sobre la pista apagaba a las gradas. Granollers tenía el partido controlado a falta de cinco minutos para el final. Bada Huesca se dejaba ir llegando a los 40 goles encajados. Partido que tuvo principio, por la buena imagen de Huesca, pero que no tuvo fin.