Diego González, jugador de la SD Huesca, ha comparecido este martes en el acuerdo de renovación de patrocinio entre el club azulgrana y Automóviles Cabrero.
El futbolista ha comentado que el vestuario está viviendo el gran momento "con muchísima humildad, con los pies en el suelo y sabiendo que la liga es muy larga. Hay que ser cautos, pero estamos felices. Es muy complicado ganar".
En lo individual, "las sensaciones son muy buenas". Este lunes, el ex del Andorra encadenaba la segunda titularidad después de no jugar en las cuatro primeras fechas de liga.
Ha comentado que sus compañeros le han "ayudado a que la adaptación sea más sencilla y, obviamente, estoy muy feliz por la imagen del equipo, que es algo que nos refuerza muchísimo".
Ante el Córdoba, el defensa tuvo mucha faena pero se mostró solvente junto al capitán Pulido: "Era un equipo que acumulaba mucha gente en la última línea y nos fijaban, tanto a los centrales como a los laterales. Creo que era un partido para tener una concentración muy alta durante los 90 minutos".
Sin duda, la victoria tras dos derrotas provoca un alivio. "Siempre te sube la moral. Incluso con las dos derrotas el balance era positivo, pero somos exigentes y estamos capacitados para sumar de tres en tres durante muchas semanas".