Domingo Malo, Abel Pardo, Marina Mata y el Ayuntamiento de Villanúa fueron los altoaragoneses premiados en el marco de la Gala del baloncesto aragonés celebrada en la noche de este pasado lunes. Una fiesta presidida por Elisa Aguilar, presidenta de la Federación Española de Baloncesto, y que contó también con la participación del delegado provincial federativo en Huesca, Carlos Lorés, y la presidenta del Club Baloncesto Femenino Huesca, Anabel Sanagustín, que forma parte de la directiva de la Territorial Aragonesa de Baloncesto como responsable de la comisión de Igualdad.
Uno de los premios especiales de la Gala, el correspondiente a la labor directiva, distinción que lleva el nombre de “Toño Riva”, fue para Domingo Malo. “Fue una sorpresa inesperada, porque después de 30 años.. Pero recibir un premio que lleva el nombre de “Toño Riva” supone un orgullo. Fuimos amigos y fue quien me llevó a la gestión del Peñas”, comenta.
Domingo Malo recibió la distinción, según sus palabras, no a título personal “sino en nombre de ese pequeño grupo de personas, hombres y mujeres, que estábamos en el club con mucha ilusión y que amábamos el baloncesto y al Peñas. Éramos el denominado staff no deportivo, que nos encargábamos de las tareas de logística y de la infraestructura, de esos detalles relacionados con los contratos de los jugadores, sus ubicaciones, la escuela, los desplazamientos…”.
Domingo Malo, que siempre hablaba de su “trabajo de hormiga” con una humildad admirable y a prueba de bomba que compartió con sus compañeros, clave sin duda del cielo al que llegó el Peñas, fue uno de los integrantes de ese gran grupo de dirigentes que construyeron el proyecto desde la Zoiti y luego el CD Peñas Recreativas, desde la década de los setenta hasta el inicio de los ochenta, hasta el salto a la ACB con el que se hizo realidad “el sueño de una noche de verano”.
Ya en la máxima categoría, y en la época dorada de la entidad peñista, Domingo Malo capitaneó desde la gerencia ese “staff no deportivo” que también tuvo que afrontar el duro proceso de transformación del club en sociedad anónima deportiva. Así, hasta el año 1994, que fue cuando tuvo que retirarse por una lesión. Se incorporó a la vida política y estuvo durante doce años al frente del Patronato Municipal de Deportes con el gobierno socialista de la ciudad.
En la Gala estuvo acompañado por otros grandes e históricos del Peñas, José Antonio Ortas y Alfredo Vizcarro, además de José Mari Calvo. Cuando recibió el premio, lo dedicó a “la labor de los directivos en los clubes de baloncesto”. “Hay que pensar que si no hay directivas, no hay clubes”, añadió, para poner en valor “el esfuerzo, la dedicación y el sacrificio de los y las directivas que hacen que exista el baloncesto. Son una pata muy importante para que funcione el baloncesto reglado”.
Domingo Malo también puso en valor el trabajo que han desempeñado las diferentes juntas directivas posteriores a su etapa que han estado al frente del CB Peñas “por mantener el legado del baloncesto de élite en la ciudad”.
Muy emocionante fue también para Abel Pardo el premio que recibió por parte de la Federación Aragonesa por su “compromiso y dedicación con el baloncesto aragonés”. Un galardón en el que se puso en valor su trayectoria. Primero como ese jugador que despuntó en el colegio de Prácticas y que fue creciendo en las diferentes categorías hasta llegar al Peñas de Liga EBA, con esa perfecta combinación de valores en cuanto a su calidad y a su compañerismo dentro y fuera de la pista. Un proceso que lo trasladó en los años que ejerció de entrenador, iniciado en Tardienta y durante muchos años en el Ramón y Cajal, donde compaginó su quehacer técnico en los colegios Juan XXIII y El Parque.
Los otros dos premios altoaragoneses fueron para Marina Mata, como internacional Sub-20 con la selección española de esta categoría -la barbastrense no estuvo presente en la Gala- y para el Ayuntamiento de Villanúa, cuyo alcalde Luis Terrén, fue quien recibió la distinción por el apoyo que el municipio tiene hacia los Campus que organiza la Federación Aragonesa en la localidad. Otro de los premios especiales fue el "José Luis Abós" al entrenador para Sito Alonso, durante muchos años vinculado al Club Baloncesto Monzón, y que actualmente dirige al UCAM Murcia.