El árbitro de Kickboxing altoaragonés Enrique Ramos será el primer aragonés que arbitrará en un Mundial, la mayor competición a nivel de este deporte en la federación internacional WAKO, reconocida por el COI.
"Tengo responsabilidad, como cualquier árbitro en cualquier evento. Ya sea autonómico, nacional o internacional. Tenemos que tener el máximo respeto al competidor. Voy con unas ganas increíbles pero siempre con la mayor humildad posible", expresa Ramos a EL DIARIO DE HUESCA.
Este próximo fin de semana comienza la aventura para este altoaragonés en una competición que se celebra en Portugal. El sábado partirá desde Madrid junto con la selección española. Al día siguiente se realizará el pesaje con todos los atletas. Ramos se juntará con el comité de arbitraje internacional para realizar un briefing. La competición se prolongará hasta el sábado de la semana que viene. En total se darán cita 1.450 deportistas de 78 países y 120 árbitros.
Normalmente, el trabajo de los jueces son tres o cuatro por combate. Siempre hay uno central, que es el que lleva el control del combate y el que ejerce las sanciones. Luego están los jueces de esquina que son los que puntúan. También hay otros de reserva que están en mesa.
La historia de Ramos con el kickboxing comienza a finales de 2009 por su padre, quien creó una escuela de la nada en Altorricón. "Al realizar artes marciales desde pequeño, quiso empezar con este tema y montó la escuela. Nos empezó a gustar, pero cuando llevaba un tiempo entré en la competición pero tenía un problema de hombro y tuve que dejarlo", explica.
Una vez apartado de los tatamis en el apartado de la competición, el gusanillo del arbitraje apareció: "Mi padre estaba metido en la Federación Aragonesa y ejercía de árbitro. Me dijo que por qué no me introducía en este mundo". Desde entonces, y hasta el día de hoy, ha adquirido una "experiencia" que le ha llevado hasta un Mundial.
"Voy a actuar como en cualquier sitio. Me da igual que sea un Mundial, yo siempre actúo igual. Es un reconocimiento bastante grande el hecho de representar a Aragón y a la selección española en el tema del arbitraje".
El kickboxing, en las olimpiadas de Invierno
Este deporte es una de las ocho disciplinas presentes en los Juegos Europeos de 2023 que no serán olímpicas en París 2024. Es curioso porque sí que están en los Juegos de Invierno. La federación española trabaja a través de la asociación WAKO, que es la única que está reconocida por el COI. En cualquier caso, a día de hoy, Ramos recuerda que el kickboxing es olímpico "por mucho que la gente pueda decir que no".
Sabe que las cosas "no se consiguen de golpe", pero a día de hoy ya es reconocido como olímpico, "y eso es un paso muy grande: se ha conseguido a base de mucho trabajo".