Francho Rufas, campeón del mundo Júnior en la competición de tiro de campo con arco recurvo disputada en Dakota del Sur (Estados Unidos), en las instalaciones del NFAA Easton Archemy Center, ha querido agradecer a todos la cantidad de elogios y apoyos que ha tenido hasta este punto intermedio, aunque álgido, en su prometedora trayectoria. "Ya en casa con la familia y amigos intentando asimilar la locura de todo este viaje y esta gran aventura al otro lado del gran charco. Quién hubiera imaginado cuando empecé a practicar este hermoso deporte hace 10 años que algún día llegaría a poder decir que soy campeón del mundo".
El serrablés ha publicado ua misiva cargada de sentimiento y gratitud, con una madurez extraordinaria. "Ahora son noticia los premios y los logros que van llegando pero detrás de todo solo algunos saben el esfuerzo y sacrificio que hay detrás siempre acompañado por mi familia y mis amigos y mis maestros-entrenadores, desde que José Manuel Garcés que me enseñó a tirar y me acompañó durante mis “primeros pasos” en este deporte, seguido de Antonio Pavón y del gran Florián Lapiedra, que siempre creyeron en mí".
Asimilar todo lo que le está sucediendo es echar la vista atrás a un espacio corto de tiempo. "Este ha sido mi primer año tirando la disciplina de campo y para poder hacer un buen desempeño he tenido a mi lado a la familia del arco de Zaragoza, Fernando Fatás, Fernando Araque, Alejandro Montañés, Patricia Puente y Miguel Ángel “Banzai”y por supuesto a la pequeña gran familia de Alfajarín Víctor Caro, Jorge Vidal y Carlos Urmeneta quienes me han ayudado las últimas semanas a preparar lo mejor posible el campeonato. Dar las gracias también a José Francisco Mendi psicólogo que trabaja con la FATA por el trabajo realizado este año".
Agradece también vivamente "todos los consejos y todo el apoyo durante todo el campeonato de Rubén Montes y de Txemari Zurbano, los dos técnicos que nos acompañaron a todo el equipo durante el campeonato. Muchas gracias por todo el apoyo y los ánimos de mis compañeros del Club Arqueros de Sabiñánigo y de todos los vecinos de Sabiñánigo, he sentido vuestro impulso en cada momento de la competición. Es un enorme orgullo poder llevar el nombre de Sabiñánigo a donde sea que las flechas me lleven".
Y un final prometedor. "Quiero dar las gracias a todos los miembros del equipo que más que un equipo ha sido una familia, esta ha sido mi primera competición representando a España y ha sido un enorme placer compartir esta experiencia con todos vosotros, gracias por todos los momentos y todas las risas, voy a despedirme con lo que yo creo que ha sido la frase icónica para todos, “lo bueno empieza mañana…”
