Ficha técnica
SD Huesca: Álvaro; Loureiro, Blasco, Pulido, Martos (Vilarrasa 46’); Sielva, Kortajarena (Balboa 90’), Gerard Valentín (Nieto 84’), Javi Martínez (Lombardo 67’); Joaquín (Tresaco 67’) y Obeng.
CD Mirandés: Luis López; Diego Moreno (Rubén 71’), Pablo Ramón, Barcia (Barbu 56’), Juan María; Tachi (Tomeo 89’), Álvaro Sanz; Gabri, Ilyas (Baeza 71’), Carlos M. y Godoy (Durdov 56’).
Árbitro: Ávalos Barrera (Comité catalán). Gorostegui Ferández (VAR). Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Kortajarena (6’), Martos (15’), Pulido (80' y 82') y Sielva (90') y a Tachi (30’), Barcia (35’), Godoy (46’), Barbu (90') y Álvaro Sanz (90') por el Mirandés. Ha expulsado por doble amarilla a Pulido (81’).
Goles: 1-0, minuto 55: Javi Martínez. 1-1, minuto 84: Carlos Martín.
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 4 de LaLiga Hypermotion disputado en El Alcoraz ante 4.710 espectadores.
Una genialidad y un error. Muy sencillo de explicar. Es lo que ha decidido el Huesca 1-1 Mirandés de este domingo; un partido muy parejo que se antojaba abocado a las tablas y tan sólo se lo llevaría quien menos errores cometiera. O, por el contrario, el que primero hiciera una genialidad. Javi Martínez está tocado por una varita y a todos le brillan los ojos cuando el soriano coge el balón. Ha sido él quien ha desequilibrado la balanza en primera instancia en un choque que estaba condenado al 0-0. El Huesca, en cualquier caso, más allá de la victoria, ha mostrado una imagen más fiable que en el estreno en El Alcoraz. Una condición indispensable y reclamada por todos. Sin embargo, un error de Jorge Pulido en un forcejeo en el área pequeña ha terminado con penalti a favor del Mirandés y el gol de Carlos Martín. Con la miel en los labios.
Ha partido Cuco Ziganda con un once idéntico al de Santander, con línea de cuatro, doble pivote con Sielva y Kortajarena, bandas para Javi Martínez y Valentín, y punta de lanza para Obeng y Joaquín. El navarro ha querido repetir visto lo visto el lunes ante el Racing con el fin de darle empaque y sentido a la idea que hizo sumar le segundo punto de la temporada.
El arranque ha estado marcado por las múltiples disputas con un animado Mirandés que ha salido envalentonado, generando varias llegadas que han puesto el miedo en el cuerpo. Ilyas buscaba las cosquillas por izquierda pero Blasco ha respondido yendo abajo muy certero y despejando a córner. Alguna imprecisión ha generado el enfado en la grada, pero en cualquier caso el equipo se ha mostrado más hecho que en la primera entrega ante la afición. Ha mostrado otro brío, diferente sensación, mucho más robusto y sin ser el manojo de nervios de hace dos semanas.
La más clara del Huesca ha llegado en el ecuador del primer acto, tras una cabalgada de Valentín por derecha, quien ha dejado atrás a dos defensores. El catalán ha puesto un pase de la muerte para Joaquín. El malagueño esperaba en el punto de penalti, pero el remate con zurda, demasiado blando, lo ha repelido la pierna de un defensor.
A raíz de esto se ha animado el Huesca, que ha encontrado más rendijas en campo contrario. Javi Martínez, a la media vuelta, se ha girado muy rápido para mandar el balón muy cerca del palo derecho de Luis López. Ha terminado con energía la primera mitad el equipo de Ziganda, con mucho ímpetu y muy productivo en tres cuartos de campo. Obeng ha enganchado un balón de volea que venía muy llovido, en un remate de absoluta fantasía que ha terminado en nada. El Alcoraz ha reconocido el esfuerzo de los suyos con ovaciones en jugadas aisladas o en simples saques de esquina que se generaban en el campo del conjunto jabato y con eso se ha llegado al entretiempo.
Muy cerca ha estado Sielva de sorprender a Luis López con un disparo desde la frontal del área con pierna zurda. No será por intentos, porque el Huesca lo ha probado de todas las maneras. En una de esas, quizás en la que menos probabilidad había de que acabara en gol, Javi Martínez ha encontrado la portería con un disparo teledirigido a la escuadra. Joaquín ha sacado en corto un córner y el soriano, con un centro-chute, ha enviado el balón a guardar. Una parábola mágica, con un balón que coge mucha altura y con rosca de fuera hacia dentro que ha sorprendido a Luis López.
Tenía que amarrar el triunfo el Huesca, sacar el gen competitivo que mostró el curso anterior. Saber sufrir para ganar. Eso a lo que tanto rédito le sacó en su día. Ha agitado el árbol Ziganda, buscando desequilibrio y mordiente arriba. Le ha dado 25 minutos a Rafa Tresaco y parece que va a contar con él más de lo que pudiera parecer. En cuanto ha podido alinear al delantero serrablés lo ha hecho, y este domingo lo ha dejado claro. La línea atacante ha pasado a ser Tresaco-Obeng-Valentín, con Lombardo de mediapunta sustituyendo a Javi Martínez y Joaquín, ambos ovacionados.
Un fallo de Pulido en el área pequeña ha condicionado lo cosechado hasta ese momento. El capitán se ha equivocado abrazando a Durdov hasta derribarlo. Esa acción le ha costado la roja y con ello llegarán ahora los problemas en el eje de la defensa porque, hay que recordar, Rubén está lesionado. Carlos Martín, por el centro, ha hecho el empate desde los once metros en el minuto 84.
Cerca ha estado Gabri de silenciar por completo El Alcoraz cuando su trallazo ha impactado en el larguero. Le ha sentado mal el gol del empate al Huesca, que ha resistido hasta el final para amarrar el punto, que es menos que nada, aunque sigue sabiendo a muy poco.