Sergi Guilló ya posa con la camiseta de la SD Huesca. El entrenador ha sido presentado este miércoles en la sala de prensa José Luis Trallero de El Alcoraz acompañado por el presidente, Agustín Lasaosa; y el director deportivo, Ángel Martín González. También han estado Ricardo y Miguel Mur, del grupo Arqa, así como el cuerpo técnico que acompañará en la nueva aventura al técnico.
"Sólo llevo un año y medio como primer entrenador, pero el reto no me da vértigo". Es una de las primeras frases de Guilló como nuevo entrenador azulgrana. El ilicitano de 34 años ha sido futbolista y cree que la experiencia "también se mide en otros factores" y no sólo en el tiempo que lleva uno en los banquillos. "Estoy muy agradecido al Huesca por esta oportunidad. Convencido de que haremos un buen año".
Martín González ha agradecido su predisposición "desde el minuto uno" y ha proyectado la "ilusión" que hay puesta en él. "Es un entrenador valiente, que le gusta jugar bien al fútbol. Ojalá los éxitos puedan ser continuos. Estoy convencido que está capacitado de sobras". También ha recordado el presidente, Lasaosa, que Guilló tenía otras opciones, pero finalmente eligió Huesca. "Estarás en una ciudad que te va a querer. La tierra aragonesa es especial y muestra su afecta rápidamente", añadía el presidente.
Se cataloga como un entrenador "valiente, dominador de áreas". Ha reconocido que, en la primera mitad de la última temporada con el Mérida, el equipo encajó muchos goles. "Los partidos se ganan a partir de la defensa. Que se vea un fútbol alegre y protagonistas con el balón. Pero no somos el Bayern de Múnich; es una frase que he dicho mucho este año. No podemos suicidarnos. Nos adaptaremos también a lo que pida el rival".
SISTEMA DE JUEGO
En primer lugar ha subrayado que ya se han sentado con Ángel Martín González para saber "cómo queremos jugar y qué jugadores queremos utilizar". Con el Mérida, este año "hemos jugado con un sistema parecido al del Huesca, pero eso no significa que vayamos a jugar de la misma forma. Sería inútil no aprovechar situaciones del año pasado. Con estos jugadores seguramente será más fácil".
Tirando todavía más atrás, ha recordado que en Orihuela jugaron con un 4-2-3-1 y en Mérida comenzaron con el mismo sistema, aunque hubo que buscar "soluciones porque encajábamos mucho y jugamos 5-2-3. Si tenemos dos extremos y dos delanteros sería de tontos no jugar con ellos. Puedo tener una idea preconcebida, de lo que me gusta, de cómo ha jugado el Huesca en gran parte de la temporada… en pretemporada decidiremos la forma de jugar. Las ideas que tenemos las tenemos claras desde hace bastantes temporadas. Los jugadores serán también los que me demuestren con qué sistema tenemos que jugar".
Aboga por tener el balón, "pero para algo y para hacer daño. Todo va en relación a los jugadores. Me gusta salir desde atrás, pero también hemos jugado de forma directa según el delantero. La idea de juego la puedo tener en mi cabeza, pero si tengo otras cosas para potenciarlo, sería de inútil no hacerlo".
EQUIPO DE TRABAJO
Dani Soler será el segundo entrenador y la mano derecha de Guilló en su andadura en Huesca, igual que en los últimos años. Soler estuvo con Guilló en Murcia e incluso en la cantera del Elche. También llega Pello Josepe Alcain Villa, quien se encargará de la preparación física. A este último "tuvimos la suerte de conocerlo el año pasado y ha trabajado como preparador físico en Murcia y ahora con la selección de Bangladesh. Teníamos muy claro que teníamos que unirnos a él porque es un profesional espectacular". Siguen en el cuerpo técnico tanto el entrenador de porteros, Adrián Mallén; como el analista, Adrián Sipán; y Carlos Calvo. "Lo importante es ser un cuerpo técnico amplio y que todos sumemos desde su departamento y rol".
LLEGADA A HUESCA
Guilló ha tenido muy claro que su sitio era Huesca. "Por el interés que han mostrado por mí, creíamos que era el sitio ideal. Es una ciudad parecida a Mérida, ciudad para crecer y tengo incluso amigos que han sido entrenadores aquí. Todos han hablado maravillas. Creo que he venido al sitio correcto acompañado de la gente correcta".
Sabe que su aterrizaje en Huesca conlleva una responsabilidad y un objetivo, que no es otro que la salvación. "Eso es lo obligado, pero no nos ponemos límites. A partir de ahí, crecer, creer en lo que hacemos y si estamos cerca lucharemos por más. El objetivo prioritario es conseguir 50 puntos lo antes posible. No renunciaremos a nada. Lo primero es lo primero y hay que ir con pies de plomo. Esa estabilidad es importante para el club".
En lo personal llega con "mucha ambición y muchas ganas", pero sabe que la "responsabilidad" de llegar al fútbol profesional está ahí. "El Huesca ha estado bailando en el fútbol profesional y lo está haciendo muy bien e en los últimos años".
PERFIL JOVEN
Se le ha preguntado por el papel que pueden desempeñar los jugadores jóvenes del filial en el nuevo proyecto. "Los dos años que he tenido en Orihuela y Mérida las situaciones eran diferentes a Huesca, porque sus filiales estaban en categorías muy bajas. Casi tirábamos más del juvenil que del filial, al menos el año pasado. Es importante no regalar nada a los chavales y, cuando estén realmente preparados para dar el salto, que nos ayuden. Tendremos a muchos en el día a día y su nivel determinará si pueden tener oportunidades o no. No soy un entrenador que se ponga medallas por poner a un chaval un día por diez minutos".
Guilló entrará a un vestuario con jugadores veteranos como Pulido, Sielva o Dani Jiménez. En este sentido, ha subrayado que "la edad es un dato, pero lo llevo con naturalidad. Puedo darles conocimientos e ideas y haciéndole ver que las cosas que le dices pueden servir para su mejora. Para mí es un privilegio entrenar a ese tipo de jugadores. Son súper importantes. Si un día me tengo que ir a cenar con un jugador o llamar a su mujer para decirle que aparezco por sorpresa… lo haré. Soy atípico en ese sentido. Quiero sacar el máximo rendimiento al jugador y eso a veces ocurre fuera del vestuario, preocupándote por la persona más allá que por el futbolista".