Cuesta echar la vista atrás para encontrar una entrada tan floja en Segunda División como la que registró en el día de ayer El Alcoraz, en la visita del Albacete al feudo azulgrana. La de ayer -sin tener en cuenta el periodo de pandemia en el que se produjeron restricciones de aforo- se acerca a la que se registró en el Huesca-Alcorcón que se disputó un 21 de enero de 2017, cuando acudieron 2.598 aficionados. Fue en la jornada 22 y el conjunto alfarero acabó llevándose la victoria gracias a un gol de David Navarro en el 83’. Al igual que ante los albaceteños, también fue en una fría tarde de enero, que prolongó una mala dinámica azulgrana. Carlos Akapo terminó expulsado y el Huesca seguía sin saber marcar en el año nuevo. Por aquel entonces todavía no se había acometido la reforma en el estadio con menos de 6.000 butacas y, por supuesto, la masa social tampoco era tan extensa como en la actualidad.
La indiferencia llenó la temporada pasada el sentimiento azulgrana. Los últimos meses de competición ya dejaron ver las intenciones. Algo más de 4.700 espectadores vieron el Huesca 1-1 Sporting en una tarde de mayo de 2022. Sol y buena temperatura que no fue suficiente para registrar más aficionados. Así, la prensa lo calificaba como “pobre entrada” para ver a un Huesca que ya no se jugaba nada a efectos clasificatorios, sin posibilidad de entrar en el playoff de ascenso a LaLiga.
En cualquier caso, la peor entrada del curso pasado no fue esta, sino que tuvo que esperar unas semanas más. Fue en el Huesca 3-2 Real Sociedad B, el último partido de la 2021/22 en El Alcoraz. Tan solo 3.811 espectadores presenciaron el choque. Fueron 700 aficionados más que ayer ante el Albacete.
Para poner en contexto, el número de personas que acudieron ayer a El Alcoraz eran las mismas que lo hacían allá por el año 2015. Por ejemplo, el 20 de septiembre de ese mismo año, apenas 3.000 aficionados se congregaron en el estadio azulgrana para ver una derrota del Huesca ante el Elche por 1-3 en una tarde calurosa. Con Leo Franco en portería, Camacho en la medular, Fran Mérida y Samu Sáiz o Tyronne en el ataque. Era el Huesca de Tevenet y, entonces, en el regreso del equipo a la liga profesional de fútbol tras el ascenso ante el Huracán Valencia en el playoff de Segunda División B.
Media de asistencia
El 15 de octubre, jornada festiva marcada en el calendario por el club para la celebración del I Encuentro Oficial de Peñas, El Alcoraz se vistió de gala para acoger a 6.424 aficionados. Esa ha sido hasta este momento de la temporada la mejor entrada. Más del doble de lo que se vio ayer lunes ante el Albacete. De esta misma manera, hasta la jornada de ayer, no se había bajado de las 4.000 ocupadas. La tendencia ya venía a la baja en el último partido ante el Andorra, cuando acudieron 4.152 aficionados.
La temporada pasada, la media general de asistencia a El Alcoraz se quedó en algo más de 5.200 personas. Ahora, después de una primera vuelta del campeonato completada donde el feudo azulgrana ha acogido 11 partidos -de los que ha puntuado en 10-, la media de asistencia se sitúa en 5.374, un número ligeramente superior a la anterior campaña.