La Sociedad Deportiva Huesca alcanza este miércoles el hito de los 3.000 abonados, apenas catorce días después de iniciar la campaña "Brilla en el Alto Aragón" que partió consciente de la dificultad de alcanzar los 7.100 socios del invierno pasado pero sin descartar el máximo número de renovaciones de ese conjunto. Hasta el día 20 se mantiene el plazo para las renovaciones y, recién pasado el ecuador, la cadencia es muy buena.
En el club, hay mucha prudencia en cuanto a las cifras, aunque se respira satisfacción por la celeridad inédita respecto a los últimos años a la hora de conformar la plantilla, un equipo "joven e ilusionante, con un entrenador que creemos que nos va a dar mucho con su carácter, su metodología y su capacidad de acercarse a los jugadores para obtener su mejor versión".
Sí se mantiene respecto a la nueva etapa iniciada en la pasada temporada la filosofía deportiva del club, "partido a partido" en el cholismo más arraigado y llevado a efecto en la exitosa Liga que ahora ya es historia. Ese primer componente se suma al segundo, al que el repuesto presidente, Agustín Lasaosa, definió en una palabra hace un año: "Ilusión".
Dentro de este tórrido verano, se respiran en la ciudad y en la provincia ganas de fútbol. Después de los años de vacas flacas, resulta evidente que las arcas del club empiezan a dejar de ser famélicas porque el proyecto acrecienta la confianza de empresas en el Huesca, y en el mundo económico la confianza se traduce en patrocinios, colaboraciones e ingresos. El ejemplo, la drástica reducción de las pérdidas respecto a las calculadas por los anteriores gestores e incluso esa llegada al equilibrio en la Fundación Alcoraz.
El fútbol, que como tantas otras facetas en la vida es un estado de ánimo, traslada las sensaciones a participación popular, que en este deporte se llama afición y, en tal estadio, el abono es una expresión de lealtad y de creencia. De ahí que dentro del club hasta sorprenda el ritmo de renovaciones que, según su criterio, "afianza la idea de que se ha acertado en la concepción y desarrollo de la campaña Brilla en el Alto Aragón" -estribillo del Himno sobre el efecto del resplandor de su escudo-. De ahí el ritmo acelerado y esos 3.000 abonados ya en las alforjas que, insisten en en club, "son de todos".