Ficha técnica:
SD Huesca: Álvaro; Nieto, Loureiro (Bolívar 70'), Pulido, Vilarrasa; Sielva, Kortajarena (Javi Mier 70'), Javi Martínez, Valentín (Tresaco 82'); Joaquín (Vallejo 62') y Elady (Obeng 62').
Real Zaragoza: Edgar Badía; Fran Gámez, Mouriño, Francés, Lluís López, Lecoeuche (Zedadka 46'); Marc Aguado, Maikel Mesa (Jaume Grau 65'), Toni Moya, Adrián Liso (Germán V. 76') y Azón (Jair 87').
Árbitro: Ávalos Barrera (comité catalán). Sánchez López (VAR). Ha amonestado a Liso (11'), Mouriño (67'), Badía (72') y Zedadka (77') por los visitantes, y a Loureiro (59'), Obeng (77') y Bolívar (90') por los locales. Ha expulsado con doble amarilla a Mouriño en el minuto 85 y a Sielva con roja directa en el 90'.
Goles: 1-0, minuto 19: Loureiro. 1-1, minuto 36: Liso. 1-2, minuto 45: Maikel Mesa, de penalti.
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 36 de LaLiga Hypermotion disputado en El Alcoraz ante 8.181 aficionados, sin récord de asistencia. El Huesca ha jugado con su segunda equipación, con la Cruz de San Jorge, con motivo de la festividad del próximo día 23. Noche agradable con buena temperatura.
Lo tenía todo de cara, pero se ha pegado un tiro en el pie. El Huesca ha caído este sábado en el derbi aragonés ante el Real Zaragoza (1-2), que se ha tomado la revancha de la ida sacando un botín precioso de El Alcoraz después de achicar mucha agua. Ha faltado puntería y acierto en el remate para sumar un punto que, sin duda, el equipo merecía.
Los azulgranas, que han acusado muchísimo el tanto del empate, pedían a gritos el descanso, ya con el 1-1, pero no les ha dado tiempo a llegar vivo porque Mesa firmaba el 1-2 mediante un penalti claro de Javi Martínez. Aunque en la segunda parte el Huesca no ha salido bien, se ha ido entonando poco a poco y ha merecido sumar, al menos, un punto. Básicamente porque ha tenido muchas más ocasiones que su oponente, que ha hecho muy poquito sobre el césped.
En los números, el Huesca vuelve a perder en casa, algo que no hacía desde el 21 de enero contra el Eibar. Además, ha tenido que vivir el sexto partido seguido en El Alcoraz para volver a encajar un gol.
Partía Antonio Hidalgo con tres cambios respecto al duelo en Ferrol, dando entrada a Nieto, Sielva y Joaquín. El malagueño ha empezado tirado en el costado izquierdo, dejando el carril diestro para Valentín, quien se situaba por delante de Nieto. Para el centro del campo, tras cumplir sanción, regresaba Sielva en detrimento de Kento.
Los primeros minutos han sido de mucho respeto por ambas partes, con medias jugadas que terminaban en pelotazos poco comprometidos y con escasa precisión, sobre todo en los ataques locales. El Zaragoza de Víctor Fernández planteaba una poblada defensa de cinco hombres, con tres centrales puros -Mouriño, López y Francés- y dos laterales como Gámez y Lecoeuche. Un esquema con el que parecía que llegaba a Huesca a sobrevivir.
La primera llegada con peligro se ha producido tras una internada de Valentín. El extremo ha encarado a Lecoeuche, a quien ha superado con facilidad, para acabar poniendo un centro a media altura al que no ha llegado Elady por muy poco. Y en ese mismo córner, que se ha botado en corto, ha llegado el tanto inaugural. Sielva ha entregado a Loureiro, quien ha cazado de espaldas un balón en el pico del área pequeña para fusilar a Edgar Badía por alto. El balón ha besado el cielo de la red; imposible para el meta blanquillo. El tanto ha sido revisado por el VAR por un posible fuera de juego del gallego, pero finalmente Ávalos Barrera concedía el gol.
Pero el empate ha llegado pronto, y lo ha hecho en un momento de desconexión. Balón raso a la espalda de Loureiro, que fallaba a la hora de ir a robar el balón a Liso. El canterano zaragocista, muy escorado, ha disparado raso, pero muy centrado. Álvaro Fernández, demasiado blando, tocaba el cuero pero terminaba en el fondo de las mallas.
Se ha envalentonado el cuadro visitante a raíz del empate, y ha arrinconado a su rival provocando faltas laterales y córners. En uno de estos, pequeña tangana que quedaba en nada. Lo mejor que le podía pasar al Huesca es que llegara el descanso.
Pero en un balón suelto en el área, manotazo de Javi Martínez a Maikel Mesa y penalti claro. Lo curioso es que Ávalos Barrera, aparentemente muy cerca de la jugada, señalaba en primera instancia falta fuera del área, pero finalmente el VAR le corregía y el propio Mesa no fallaba ante Álvaro. Una auténtica faena por el momento del partido que era.
Con este panorama, teniendo en cuenta que el Huesca no ha remontado un partido desde hace tres años -no es ninguna forma de hablar-, Hidalgo debía buscar soluciones efectivas en el segundo acto. Pero su equipo seguía teniendo en mismo mal color: con muchas dudas y pocas certezas. Los azulgranas, esta vez de blanco, se encomendaban a la figura de Valentín. Casi de forma descarada, porque el juego en ataque siempre se volcaba a la derecha.
El principal peligro seguía llegando, una vez más, a través del balón parado. Vilarrasa botaba un córner que hacía estallar el "uy" en la grada. Mediante un elegante disparo, Maikel Mesa se topaba con Álvaro, quien tenía que volar para sacar un balón que finalmente lo ha escupido el larguero.
El Alcoraz pedía un poquito más a sus chicos, pero entre resoplido y resoplido, el Huesca seguía demasiado estático y sin ideas. Hidalgo agitaba el equipo en el 62' introduciendo a Obeng y Vallejo por Joaquín y Elady. Bolívar ha tenido la ocasión más clara al rematar con la cabeza una falta lateral botada de forma impecable por Vilarrasa. Pero el venezolano no tiene ni el instinto ni la calidad del ariete, por lo menos para esta categoría.
Se metía en un jardín Valentín al ir a chocar con Edgar Badía en un balón aéreo que ha terminado en un festival de amarillas. Todo venía de una jugada en la que Obeng ha caído en el área, de espaldas, ante un aparente agarrón de su par.
Ha salido Tresaco de extremo derecho en sustitución del fatigado Valentín, y lo cierto es que el serrablés ha ido de lo mejorcito por el costado derecho. El Huesca se iba arriba en busca del empate y volcaba el juego en el campo de la avispas. En una de esas, Mouriño se marchaba a la calle al ver la segunda amarilla con cinco minutos más el añadido todavía por delante. Esa misma falta la botaba Sielva y el balón lo sacaba de forma incomprensible Javi Martínez sobre la línea de gol.
El tramo final ha sido un auténtico asedio. Obeng ha tenido un disparo escorado que ha sacado Badía. Un mal control ha condenado a Sielva, que ha sido expulsado al cometer una falta siendo el último hombre. No estará en Valladolid.
En la cabeza de Obeng ha estado el empate que ya cantaba todo el estadio cuando ha ido a rematar un envío lateral. Ese balón no ha terminado en las mallas de forma incomprensible y con eso se han marchado todas las esperanzas azulgranas. El Huesca no ha sabido salir de esa boca del león en la que ha estado metido desde el 1-0.