La Real Sociedad B ha sido el último equipo en subirse al tren de Segunda División para la temporada 25-26. Y no sin polémica porque lo ha conseguido en la prórroga ante el Nàstic de Tarragona. En el patido de ida ganaron los donostiarras 1-3 y en la vuelta, dentro de los 90 minutos, ha replicado el cuadro catalán con un 0-2 para irse a la prórroga. Y en el tiempo extra ha estallado la polémica con un penati inexistente señalado contra el Nástic que la Real B ha aprovechado para acortar distancias y ponerse por delante en la eliminatoria. Pero poco después el árbitro no ha señalado penalti en el área blanquiazul por una mano de un defensa. La maldición de los playoffs está servida para el Nàstic que lleva tres jugados en las cuatro últimas temporadas y en la pasada hubo un escándalo monumental en el duelo decisivo con el Málaga. Lo que sí está claro es que la Federación tiene que replantearse seriamente la necesidad de implantar el VAR en estos duelos tan decisivos por la cantidad de intereses que hay en juego.
Dicho lo cual, ya está definido el mapa de Segunda División, que presenta la participación de 13 comunidades autónomas. La mayor participación corresponde a Andalucía con 5 equipos: Almería, Málaga, Granada, Córdoba y Cádiz. A continuación está Castilla y León con 4 equipos: Valladolid, Burgos, Mirandés y Cultural Leonesa. Aragón, con Huesca y Zaragoza, tiene dos representantes, los mismos que el País Vasco con la Real B (único filial de la categoría) y el Eibar. Y luego tenemos a la Comunidad de Madrid con el Leganés, Canarias con Las Palmas, Asturias con el Sporting, Cantabria con el Racing de Santander, Valencia con el Castellón, Castilla-La Mancha con el Albacete, el Principado de Andorra con el equipo que preside y co-entrena Piqué y la ciudad autónoma de Ceuta.
Extremadura, Islas Baleares, La Rioja, Cataluña y la ciudad autónoma de Melilla son las que quedan fuera del mapa.