Grande dentro y fuera del tapiz. Así es Inés Bergua, la capitana del equipo senior de gimnasia rítmica, reciente medalla de bronce en el Campeonato de Europa. La joven gimnasta (19 años recién cumplidos) ha disfrutado de unos días en Huesca, una pequeña tregua tras completar con éxito el curso académico y justo antes de encarar el momento culminante deportivo de la temporada con el Campeonato del Mundo de Valencia el próximo mes de agosto, si bien antes (21-23 de julio) figura en el calendario una prueba de Copa del Mundo en Milán.
Y en ese pequeño descanso, como suele ser “norma de Inés”, no ha faltado la visita a su otra familia, la del Club 90, a quien hizo un hueco durante su estancia para acudir a la sede de la entidad para compartir la experiencia que está viviendo con el equipo nacional. Una especie de “master class”, sin piruetas sobre el tapiz, con esas niñas “que de mayores quieren ser Inés Bergua”.
Llevó una fotografía de la selección enmarcada y con esta dedicatoria: “Con cariño para mi gran familia del Club 90. Gracias por vuestro apoyo y amor, os quiero”. “Gracias Inés, seguiremos volando a tu lado”, respondió el club.
Mamen Tornil, la entrenadora que empezó a moldearla cuando entró en el club en la etapa de psicomotricidad, comentaba a EL DIARIO DE HUESCA que había visto a Inés “muy relajada, muy animada, muy centrada y con muchas ganas” de afrontar el reto mundialista de Valencia y después el sueño hecho ya realidad de llegar a los Juegos Olímpicos de París en 2024.
Inés Bergua departió con las pequeñas deportistas del club, que atendieron embelesadas sus explicaciones y dio respuesta a las preguntas que le plantearon. Cómo es el día a día, que supone llevar los galones de capitana de la selección (“una responsabilidad más, tener muy claro lo que hay que hacer”, fue la respuesta) y también cómo la llaman sus compañeras (“a veces Inés y en otras ocasiones capitana”).
Pero por encima de todo, Inés Bergua les dijo a las gimnastas que nunca dejen de “perseguir los sueños”. A fin de cuentas, el trabajo y la perseverancia son los caminos que conducen a que esos anhelos se conviertan en realidad.
Inés tuvo tiempo también para compartir mesa y mantel en una cena con las entrenadoras del club: Mamen Tornil, Cristina Perea, Nerea Abad y Ana Gómez. En esta cita estuvo presente Jara López, que también fue gimnasta internacional y después entrenadora del club. Como comentaba Tornil con una sonrisa, admirada del crecimiento y la madurez de su “pequeña” Inés, no solo ha vuelto a Huesca con galones sino también “con tacones”.
La presidenta del Club 90, Vanesa Lanuza, agradeció “el gran gesto” de Inés en este pequeño descanso “porque siempre que viene a Huesca saca un rato para estar con nosotros”.
TAMBIÉN LA FEDERACIÓN ARAGONESA
Inés Bergua también tuvo con la Federación Aragonesa un gesto de agradecimiento hacia el apoyo que le brinda constantemente y entregó otra foto enmarcada con una dedicatoria similar a la que hizo con el Club 90 y en este caso destinada “a toda la rítmica aragonesa”.
La presidenta de la Territorial, la barbastrense Máfer Lardiés, compartió esa imagen con todo su equipo directivo en Teruel, con motivo del Torneo de Primavera de gimnasia rítmica que se celebró durante el pasado fin de semana.
“De parte de Inés os damos las gracias por todo el apoyo que recibe todo el tiempo de ésta su Federación y de los que la integramos, que somos todos. Que sepáis que le llegan nuestros ánimos, nuestros aplausos y cada vez que nos alegramos por sus éxitos. Inés: de parte de todos nosotros infinitas GRACIAS y te deseamos toda la fuerza del mundo en la recta final cara al Mundial”, es la respuesta de la Federación.
Máfer Lardiés comentaba que “Inés siempre nos tiene muy presentes y estamos muy orgullosas de ella”.